Tras la confirmación de COVID-19 en un agente penitenciario y una persona privada de libertad (PPL) en la Penitenciaría Regional de Ciudad del Este (CDE), la cartera de Estado activó el protocolo creado en marzo de este año y procedió al inmediato aislamiento de los mismos. También se realizará la prueba a todos los funcionarios y PPL de la penitenciaría.

Desde la aparición del coronavirus el Ministerio de Justicia trabaja de manera coordinada con el Ministerio de Salud, por lo que se han realizado el seguimiento a todos los casos respiratorios detectados como sospechosos.

El Viceministro de Política Criminal, Rubén Maciel Guerreño, comentó que el protocolo establecido para este caso fue activado. “Ya estamos trabajando sobre la base de la resolución N° 295, donde se establece como se tiene que proceder ante casos positivos y sospechosos. Hay un lugar habilitado para aislar a los casos positivos y sospechosos” afirmó.

Por su parte el Director de Salud Penitenciaria, Daniel Cantero explicó que se realizarán muestras de COVID-19 primeramente en el pabellón donde se detectó la enfermedad para luego tomar las muestras de toda la población. “No habíamos tenido ningún caso positivo, sin embargo, hoy fuimos informados de estos dos casos en Ciudad del Este y a partir de ello vamos a seguir haciendo todo el trabajo preventivo. Se va hacer una mayor cantidad de toma de muestras en la Penitenciaría Regional de Ciudad del Este, estamos en contacto con X Región Sanitaria y el Hospital Regional. Desde hoy se van hacer una cantidad de toma de muestras tanto de funcionarios penitenciarios y de PPL que estuvieron en contacto con los positivos”, afirmó.

La Penitenciaría Regional de Ciudad del Este es uno de los centros de privación de libertad cuyas PPL voluntariamente decidieron no recibir visitas familiares ni sociales por lo que se está trabajando para determinar la fuente de contagio y poder tomar las medidas específicas a fin de evitar el contagio en los demás establecimientos penitenciarios.