El 8 de octubre del 2018 la policía recibió quejas de vecinos y transeúntes, de que desde la casa ubicada en Oliva y Montevideo de la capital, se olía un fétido olor que inundaba la cuadra.
Agentes designados para ir a verificar la denuncia fueron hasta el sitio y tras una rápida revisión, comenzaron a detectar cadáveres enterrados, uno apenas tapado con arena, y otros en un pozo.
Los cuerpos pertenecían a Dalma Rojas Rodas de 23 años, de sus hijos de 4 y 6 años, de su mamá Elva Graciela Rodas y de su padre Julio Rojas.
Horas después del macabro hallazgo, la policía detenía a Bruno Marabel, pareja de Dalma y quinto integrante de los que vivían en el lugar.-
Investigadores de la policía señalaron que la eliminación física de las víctimas se realizaron entre el 28 de setiembe y primeros días de octubre de aquel año.
“Yo maté a Julio Rojas, pero solo a él, niego haber matado a mi familia”, respondió en juicio Marabel, cuando le pidieron su relato.
La fiscal Esmilda Alvarez, interviniente en el expediente, sin embargo, aseguró: “No hay ninguna duda que él es el asesino de dos mujeres, dos niños y un hombre“, aseguró la representante del Ministerio Público.
El Tribual de Sentencia condenó a Marabel, el 2 de noviembre del 2020, a la pena de prisión de 40 años.
Hoy Bruno, calificado como el “monstruo de la casa del horror” guarda prisión en el penal Cereso de Itapúa, tras un escándalo que generó el hecho de que mujeres iban a visitarlo al sitio, y manifestaban la voluntad de mantener relación sentimental con el mismo.
Bruno Marabel se relacionó con una de sus visitadoras, con quien tiene ahora un hijo, de quien dijo estar totalmente entregado a la voluntad de darle el máximo cariño de padre.
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