Según las graves denuncias, serian más de 100, en contra de Walter Leiva y Odilón Leiva de O. Leiva Automotores S. A, por denuncia falsa, estafa, asociación criminal, lavado de dinero y usura, los mismos deberían estar con prisión preventiva durante la investigación.

Elvia de Solís habría sido estafada supuestamente por Walter Leiva y Odilón Leiva, quienes luego de vender una camioneta Toyota Hilux por 55.000 dólares, la denunciaron por apropiación, y con complicidad del fiscal Alcides Espinola incautaron en forma irregular el rodado.

No sería el único caso, donde venden un vehículo y solo expiden una Autorización de Conducir al comprador, para luego utilizar al Ministerio Público como agencia de cobranzas, tal como lo hacia también en Luque, Ramón González Daher, quienes las cuestiones civiles la ejecutaban por lo penal y así enviaban hasta presos a los que se oponían a sus intereses.

Los Leiva, según las denuncias, no firman contratos, pero si pagarés, donde se establecen intereses al arbitrio de los mismos, de manera a que el rodado nunca pueda pagarse de la manera «pactada de palabra» ya que al no existir un contrato simplemente denuncian como que «prestaron» o «alquilaron» lo que vendieron.

Según víctimas, que serían más de 100, muchos dejaron de luchar en los estrados judiciales por temor a las amenazas del propio fiscal Alcides Espinola, quien según su actuar tendría una «comisión» importante a la hora del apriete correspondiente.

Denuncia falsa, estafa, asociación criminal, lavado de dinero, evasión de impuestos y usura serían los hechos punibles cometidos por Walter Leiva y Odilón Leiva, quienes en la brevedad pasarían tras las rejas para no obstruir las investigaciones venideras.

Walter Leiva amenazó en todo momento que la justicia del guairá está a merced del dinero que alardea poseer y según las últimas actuaciones del fiscal Alcides Espinola se puede certificar que todo tiene un precio para cometer semejante despropósito judicial.

El fiscal Espinola sería denunciado ante el JEM en estos días, y también sería investigado como parte de la banda criminal instalada por los Leiva, quienes en todo momento utilizaron al Ministerio público como aliado