Imágenes que fueron captadas en el sitio donde cinco policías llevaron a la fuerza a Edgar Ayala, refuerzan la hipótesis de que el hecho ocurrido en Luque, sería un caso de mejicaneada policial.

Los policías Luis Miguel Colmán Perez, Ramón David García Blanco, Carlos Antonio Aquino Morel, Pedro Antonio Blanco González y Richar Renè Rojas Vera, fueron recluidos en la Agrupación Especializada, como autores principales del episodio.

Los mismos empeoraron el cuadro de situación en el que están inmersos, al ocultar los cinco vehículos (pertenecientes a ellos) en los que presuntamente perpetraron el apriete. En efecto, la fiscalía ordenó allanamientos varios, en busca de los automóviles visualizados en las cámaras que captaron el momento del hecho.

Las imágenes de los circuitos son relevantes. Muestran el momento en que Edgar Ayala conversa con un hombre (de supuesto nombre Joel, a quien -dice- debía comprar ganado vacuno). Luego Joel va hasta un vehículo del que retira una carga que, a duras penas la traslada, acerca y mete a la camioneta de Ayala. Después irrumpen en el sitio dos hombres (serían los policías) que llevan a Ayala. Desde otro circuito se capta el momento en que la carga que estaba en el vehículo de Ayala es trasladada a un automóvil, que es sacado por un conductor del lugar.

¿Que contenía el pesado paquete? En su declaración, Edgar Ayala no hizo ninguna mención al paquete que estaba en su móvil, y que luego fue llevado por parte de un hombre, tal como se visualiza en uno de los videos.

También hubo contradicción entre lo que dijo a la policía: que estuvo alrededor de 7 horas retenido por los cinco policías y que fue duramente golpeado (médico forense descartó golpes). Y a la fiscalía: que tras ser despojado de 30 millones de guaranies, fue llevado brevemente y abandonado. Y que pidió alojamiento temporal a un amigo en vista que había peleado con su pareja y no quería regresar a casa, como explicación de su desaparición.

Una línea de investigación seguida por la fiscalía, consigna que los policías se habrían enterado, vía inteligencia, de la transacción ilegal que iba a realizarse. Que decidieron intervenir para abortar la misma, quedarse con la droga y de paso robar el dinero que Ayala dijo era para la transacción comercial.

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