Oficinas, fábricas, cajeros automáticos, establecimientos comerciales y gastronómicos deben mantener las ventanas y/o puertas abiertas para impedir la propagación del virus del COVID-19 mediante aerosoles, así como otros virus respiratorios. Es igualmente esencial abrir las ventanillas si viaja en taxi, transporte público u otros servicios de transporte; si los buses tienen las ventanillas cerradas, solicitar la apertura de puertas.

La transmisión viral por aire o por aerosoles es una de las vías de contagio del COVID-19 y ocurre mayormente en espacios cerrados sin ventilación, incluso puede darse al aire libre (aunque la posibilidad es mucho menor) cuando hay ausencia de mascarilla y no se cumple con la distancia física recomendada.

Cuando una persona infectada habla, grita, tose o estornuda emite muchas partículas de diferentes tamaños, algunas caen al suelo o en superficies, y las más pequeñas pueden transportarse varios metros y permanecer en el aire por periodos prolongados. Estas microgotas o micropartículas respiratorias ingresan al organismo cuando la persona sin mascarilla las inhala, produciéndose de esta manera la infección por COVID-19.

Al usar mascarilla se reduce la propagación de las gotitas respiratorias y partículas pequeñas. Se recomienda utilizar la mascarilla quirúrgica por su alto nivel de protección de más de 80%, sobre todo en lugares donde sea difícil mantener la distancia (bus) y en entornos hospitalarios. Así también, mantener una distancia mínima de 2 metros con las personas que no vivan con usted en la misma casa, insistir con el lavado de manos correcto y constante con agua y jabón, y en ausencia de estos elementos usar solución alcohólica al 70% siempre y cuando las manos estén visiblemente limpias.

Para prevenir la transmisión por vía aérea:

• Preferir actividades al aire libre.

• Priorizar la correcta ventilación de sitios cerrados (abrir puertas, ventanas, usar extractores y filtros de aire o un ventilador apuntando a la ventana).

• Usar mascarillas que cubran correctamente boca y nariz, manipularlos lo menos posible, siguiendo las normas de higiene.