Las camas de terapia inten­siva se encuentran repletas por lo que debieron convertir tres salas de quirófano en uni­dades de cuidados intensivos (UCI). Así explicó Agustín Sal­dívar, director del mencionado hospital público, durante una entrevista que mantuvo con el canal de televisión GEN.

El médico aseveró que la epi­demia de los accidentes via­les nunca vio un descenso, incluso en plena pandemia del covid-19. Los controles que ejercía la Policía, en el marco de las medidas sani­tarias más críticas, tuvieron casi nulos efectos en las cifras de accidentados.

“Aplaudimos que bajen las víctimas del covid, pero las de siniestros se mantienen; amanecimos con 246 pacien­tes asistidos en urgencias por siniestros viales, 58 por ataques de arma blanca y de fuego, y 157 de accidentes en moto”, expresó.

QUIRÓFANOS

Las cifras de accidentados repuntan durante los fines de semana, por lo que las auto­ridades del hospital decidie­ron convertir tres quirófanos de cirugías programadas en terapia intensiva. Durante toda la semana pasada se realizaron 180 intervencio­nes quirúrgicas, entre las de urgencias y las programa­das. Entre las intervenciones agendadas solo se pudo ejecu­tar 8 de las 21. “La gente defi­nitivamente no usa el casco que le podría salvar la vida; además, no respetan las nor­mas y las señales de tránsito, también ocurren las carreras clandestinas por las que tuvi­mos que lamentar víctimas entre el viernes y el sábado”, culminó Saldívar.

//La Nación.