La Maratón Internacional de Asunción 2016 fue el antes y el después en la vida de Herme López. Durante la carrera sintió dolor y luego de semanas se fueron intensificando. Los médicos le diagnosticaron cáncer. Tras meses de lucha, la atleta falleció hoy.
“El mundo se me vino abajo. Lloré amargamente y no quería saber nada de nadie. Pero después fue la gente la que me motivó. Organizaron una carrera para ayudarme y, entonces, dije: ‘¿Cómo ellos están luchando y yo no voy a luchar?’, así que me levanté y di pelea”.
La prueba en su vida no fueron los metros que debía correr, si no como encarar el mundo cuando luego de una prueba médica le diagnosticaban cáncer. La Maratón Internacional de Asunción en 2016 fue el antes y el después para Herme: a los 30 kilómetros sintió un dolor pero terminó la carrera siendo la primera paraguaya en cruzar la meta. No sintió alivio físico en los días posteriores y desde el diagnóstico, el día a día cambió. Fue operada un 20 de febrero en el Hospital de Clínicas con el método HIPEC (quimioterapia hipertérmica intraperitoneal).
“Sí, tenía miedo, pero lo único que le preguntaba a mi médico era: ‘Doctor, ¿voy a volver a correr?’”, describía la atleta en la SND. “Había recibido mucha ayuda sicológica, así que cuando abrí los ojos luego de la cirugía, sabía dónde estaba y que había salido bien”, culminó. Mese después, volvía arroparse de su deporte favorito. “Si no era deportista, la historia hubiera sido muy diferente: no estaría en condiciones físicas de aguantar un tratamiento tan intensivo ni tendría esos amigos que me devolvieron la vida”, agregó.
Cuando el reloj de nuestro caminar se detiene, para muchos existe la eternidad. Y quizás, allá fue Hermelinda López. La guaireña falleció esta madrugada a sus 39 años. Sus números, sus tiempos, sus trofeos quedarán en en la estadística porque la verdadera victoria la consagró como campeona de la vida. ¡Que en paz descanses, Herme!
Fuente ABC color.