El último temporal dejo secuelas negativas a una institución educativa del sector rural de la ciudad de Caaguazú. Al menos tres aulas quedaron destechadas por completo a raíz de la fuerza del viento que hizo volar la estructura.

Esta situación no permite el desarrollo normal de las actividades académicas perjudicando a niños de tres grados, que desde el pasado martes están sin la posibilidad de dar clases. Hasta el momento el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) no dio ninguna respuesta.

Se trata de la Escuela 1824 Tomas Romero Pereira de la compañía San Juan, segunda línea, Ñurumi, en el distrito de la ciudad a Caaguazú, distante a unos 14 kilómetros del casco urbano.

La institución alberga a unos 90 alumnos aproximadamente en sus dos turnos. El temporal del pasado martes cayó con intensidad en el lugar afectando también a varias viviendas.

Son tres las aulas más dañadas con la pérdida total de la estructura metálica del techo esparcido por el patio a consecuencias de la fuerza del viento.

Profesores y padres de familia señalaron que la municipalidad local desarrolló el proyecto de cambio de tejas y tejuelones por una estructura metálica, que no resistió la alta velocidad del viento durante el temporal.

Tres grados ya llevan ocho días sin actividad escolar por falta de espacio físico en condiciones.

La única alternativa que resta es el desarrollo de clases bajo árboles en los próximos días para completar el programa establecido. Padres de familia de esta escuela rural mostraron su preocupación y extrañeza por la falta de respuesta de parte de los responsables del MEC a nivel departamental.

//Robert Figueredo