En horas de la tarde de ayer viernes un conocido delincuente del barrio San Roque de la ciudad de Lambaré se disponía a ingresar a una propiedad para llevarse alguna pertenencia de valor, pero en su intento murió electrocutado. Hasta el momento se logró identificar a la víctima como Chino, que se dedicaba aparentemente al reciclaje.
Según datos proveídos por el comisario Edgar Vega, de la Comisaría 16, el hombre fue identificado como Rafael Eugenio Ayala Ortiz, alias Chino, de 33 años. Afirmó que los testigos manifestaron que el ahora fallecido intentó ingresar a la vivienda pasando sobre la muralla y reja, zona en donde estaba el medidor de la Ande. Cuando se disponía a pasar al otro lado, habría recibido una fuerte descarga eléctrica, por lo que quedó incrustado por la reja.
Cabe destacar que hasta el lugar llegaron los bomberos voluntarios, quienes intentaron salvar al hombre, pero al inspeccionar el cuerpo se dieron cuenta de que el hombre ya no tenía signos vitales. El cuerpo estuvo varias horas en el lugar, ya que se esperaba la presencia de los funcionarios de la Ande para bajar la energía atendiendo a que la reja o medidor podrían dar descargas.
Por su parte, los dueños de la vivienda indicaron a los agentes de la Policía Nacional que la reja no está electrificada, por lo que presumen que habría un cable que hizo cortocircuito. Sería el cable que se conecta la columna de la Ande al medidor de la vivienda y que no contaba con recubierto, por lo que propició la descarga.
En tanto que el médico forense Héctor Méndez, que llegó hasta la escena,
tras inspeccionar el cuerpo ya sin vida confirmó que el hombre murió por una fuerte descarga eléctrica o electrocutado. “No fue a propósito (no estaba electrificada la reja), había un desperfecto eléctrico”, ratificó el profesional médico en entrevista con la 1020 AM.
Aparentemente Chino logró subir a la muralla de más de dos metros y luego trepó una reja que forma parte de la valla perimetral de la vivienda en cuestión, pero al intentar pasar al otro lado se sostuvo o tuvo contacto con el caño metálico del medidor, que a la vez tenía contacto con un cable que estaba pelado, provocando su electrocución y posterior muerte.
