Dos hechos de violencia, casi de manera simultánea ocurrieron en la noche de este martes, cuando desconocidos lanzaron bombas de estruendo en el domicilio del nuevo presidente del Sportivo Luqueño, Daniel Rodríguez, como también en la casa del vicepresidente segundo de la institución, Julio César Romero, más conocido como “Romerito”.
El hecho según relato del titular auriazul ocurrió cerca de las 23 horas, cuando una persona encapuchada llegó hasta frente a su domicilio y lanzó al patio bombas causando algunos destrozos y fundamentalmente susto a toda la familia. Rápidamente se dio aviso a las autoridades, que se hicieron presentes en el lugar, tratando de encontrar alguna evidencia y dar con los responsables.
“Lamento lo ocurrido, hoy me pasa a mí, en otro momento le puede suceder a cualquiera. Si estos grupos siguen avanzando e incluso pueden adueñarse de la sociedad. Espero que no se vuelva a repetir, si existe alguna diferencia que tienen con la forma en que estamos encarando la conducción del club, la gente pueden ir a conversar con nosotros”, expresó Daniel Rodríguez a la radio Azul y Oro, sin especificar quienes serían los autores.
Es la cuarta vez que atentan contra su casa, pero es la primera vez luego de asumir la presidencia del club hace un poco más de dos semanas. “Es el mismo modo operandi, considero que la Fiscalía debe poner su empeño en aclarar todo esto antes que ocurra hechos que lamentar”, agregó, el dirigente.
Igualmente Romerito, se sintió apenado por lo acontecido. “Ni siquiera hicieron por mí, porque yo estaba viendo una película cuando desconocidos tiraron en la casa cuatro bombas, lo hicieron contra mi hija y mis nietos. Ya hicimos la denuncia y con el circuito cerrado ojalá se pueda identificar”, expresó.
Según dejó entrever el presidente auriazul, existiría gente que conspira contra el club, porque en el partido frente a Guaraní, se activó gas lacrimógeno cerca de unos de los arcos y que expone a una suspensión del estadio Feliciano Cáceres de parte de la APF.
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