Un hombre cayó a un pozo de 30 metros de profundidad que estaba oculto entre las malezas y sobrevivió de milagro. El hecho ocurrió en la ciudad de Itá.
Dentro del predio de una finca ubicada sobre las calles General Samaniego y General Díaz, del barrio Sportivo, de la ciudad de Itá, en el Departamento Central, se encontraba sin tapa y casi oculto entre las malezas un pozo vacío de 30 metros de profundidad.
Un hombre, identificado como Miguel Lezcano, de 60 años, al no percatarse de su presencia, cayó repentinamente al hoyo, pero afortunadamente sobrevivió al hecho, informaron a través de Telefuturo.
De acuerdo con el relato de Pedro Medina, uno de los intervinientes, Lezcano y otra persona, que era su ayudante, se encontraban limpiando el inmueble, cuando en un momento dado decidieron descansar.
Mientras el ayudante se fue a comprar alimentos, la víctima se trasladó hasta la parte trasera de la finca y cruzó la zona del pozo que estaba sin tapa y cubierto de algunas malezas, sufriendo una caída libre de entre 25 y 30 metros de profundidad.
»Su compañero se fue a comprar algo para comer y a la vuelta, cuando vino, ya no lo encontró más. Empezó a buscar y a escuchar ruidos que salían del pozo y entonces ahí se le encontró dentro (a la víctima)», relató Medina.
Inmediatamente acudieron al lugar bomberos voluntarios de la zona y, tras un arduo trabajo de cerca de una hora, lograron rescatar al sexagenario con vida y afortunadamente estaba sin ninguna fractura.
El voluntario también señaló que el pozo anteriormente se utilizaba para agua, pero como quedó sin el líquido, actualmente ya es un hoyo vacío y sin uso.
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