Según una información publicada por el diario capitalino “Última Hora”, en un colegio de la ciudad de Caaguazú, los alumnos deben dar clases bajo árboles debido al peligro de derrumbe de sus aulas, sin embargo las autoridades hacen caso omiso a esta realidad. Contactamos con padres de familia de la institución, quienes confirmaron la versión y agregaron que a pesar de las denuncias nadie se acercó al colegio.
Ante el riesgo que representa seguir bajo el techo de las aulas del Colegio Nacional San Juan Bautista de Curuzú Araujo, del distrito de Caaguazú, directivos de la institución han decidido trasladar a los alumnos bajo frondosos árboles para el desarrollo de las actividades escolares del presente año académico.
El pabellón levantado por padres de familia en los primeros años de la década del 80 presenta un notable deterioro en toda su estructura de material cocido.
Las tejas, tejuelas y maderamen completaron su vida útil. Los días de lluvia se notan grandes goteras chorreando agua por todas partes.
La combinación de madera que sirve de soporte al techo está dañada debido al paso del tiempo, observándose grandes desprendimientos de tejas y tejuelas.
Las paredes están con grandes grietas y fisuras, a lo que se puede sumar la gran humedad que ha tomado a la estructura de ladrillos y piedra.
Docentes del colegio han señalado que desde hace 10 años reciben a profesionales del Ministerio encargados de relevar datos con la promesa de una nueva construcción.
Hasta el momento todos los proyectos de mejorar las condiciones edilicias quedaron sin respuesta. La situación se volvió insostenible, generando enorme preocupación en la comunidad educativa de este colegio ubicado en el área rural de la ciudad de Caaguazú.
