El ministro de Educación y Ciencias, Eduardo Petta, no encontró mejor justificación sobre los libros que fueron impresos con errores que decir que los docentes “jugarán a hacerle encontrar el error a los alumnos, como una tarea”, de manera a subsanar la incómoda situación.
Con un ánimo de justificación a cualquier precio, el titular del Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) encontró la manera de argumentar la vergonzosa situación descubierta diciendo que usarán los errores de los libros a su favor, aplicando una suerte de estrategia didáctica, desafiando a los estudiantes a “encontrar el error” en las páginas donde se registran faltas ortográficas lamentables para una editorial.
“Vamos a hacerle encontrar el error al alumno, como una tarea. Somos humanos”, continuó argumentando Eduardo Petta, con actitud defensiva.
“En este caso no es el ministro (el del error), es todo un equipo de trabajo, pero son dos páginas y vamos a revisar absolutamente todo. Vamos a construir entre todos. Si hay fe de erratas, se hacen las correcciones, se encuentra el error (…) Juguemos con los chicos”, animó el ministro para intentar zafar de la vergonzosa situación descubierta.
Los materiales plagados de errores fueron elaborados por el Ministerio de Educación y se imprimieron en Industrias Gráficas Nobel SA, empresa representada por María Eugenia Paleari de Harrison.
Los textos distribuidos contienen errores de todo tipo y muy notorios.
“En la clace somos 38 alumnos” se lee en las páginas 37 y 71 del “Cuaderno de trabajo para el estudiante del primer grado” distribuido por el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) a todas las escuelas del país en el marco del programa para mejorar la enseñanza de matemática, MaPara (Matemática Paraguay).
Este tipo de errores, junto con faltas de acentuación, se repiten en varias páginas del cuaderno de trabajo, no solo para los niños del primer grado, sino también en los destinados al segundo, el tercero y subsiguientes. También los hay en la “Guía didáctica para el docente”, en que incluso se habla de la “intención” –pero con “S”– que tiene el MEC con la implementación de este plan.
Faltas de concordancia, como “escribo en LOS bolsas”, se pueden hallar en la página 93 del ejercitario para el primer grado, libro en el que también se escribió: “dos botellas plásticas: uno para… y otro para…”.
