La Unidad de Terapia Intesiva (UTI) pediátrica habilitada durante la pandemia por el intendente de Ciudad del Este, Miguel Prieto, jamás estuvo operativa, según denuncias. La obra tuvo un costo que ronda los G. 2.000 millones.
Alto Paraná atraviesa por una crisis en materia sanitaria debido a la falta de suficientes camas de terapia intensiva pediátrica y neonatal, hecho que ya ha costado la vida de algunos bebés.
A esta problemática se le suma ahora la denuncia realizada desde la Asociación PAS (Prevenir, Amar y Salvar) y que involucra directamente a la administración de Miguel Prieto.
De acuerdo a la denuncia, el pabellón de contingencia habilitado durante la pandemia de COVID-19 en el Hospital Regional de Ciudad del Este nunca estuvo operativo. Dicho espacio contaba supuestamente con 8 camas UTI.
“Alto Paraná sufre de una negligencia estatal, con una ausencia de terapia para niños en el hospital de Ciudad del Este“, sostuvo Alice Monges, presidenta de la Asociación PAS.
La misma cuestionó que el Consejo Departamental de Salud jamás se haya tomado la molestia de verificar las obras y comprobar si es que este pabellón efectivamente se encontraba en funcionamiento.
Los niños que requieren ser internados en terapia intensiva deben ser trasladados al Hospital Los Ángeles de CDE o a un centro asistencial (a veces en otro departamento) que cuente con camas UTI disponibles, mencionó Monges.
Para la construcción del pabellón de contingencia fueron invertidos cerca de G. 2.000 millones, dinero procedente del municipio de Ciudad del Este.
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