Un sacerdote católico ha desatado polémica en Italia por haber celebrado una misa el domingo dentro del mar utilizando un colchón inflable como altar.
En una nota de prensa publicada en su página web, la arquidiócesis de Crotone, al sur de Italia, donde fue celebrada la misa, condenó al sacerdote.
“La celebración eucarística tiene un lenguaje particular, está hecho con gestos y símbolos que es justo respetar y valorar, no hay que renunciar a ellos con tanta superficialidad”, escribió.
“Es necesario mantener ese mínimo decoro y atención por los símbolos”, insistió.
Debido a la ola de calor que azota a la península y la ausencia de sombra, don Mattia Bernasconi, sacerdote milanés, decidió celebrar en las acogedoras aguas del Mediterráneo la misa, con la que se concluían las actividades de un campamento de jóvenes voluntarios de la asociación antimafia Libera, que administra tierras confiscadas a la mafia.
El hecho fue inmortalizado por las cámaras y transmitido por varios medios.
En las imágenes se puede ver al sacerdote, sin camisa, frente a su improvisado altar y frente a un grupo de personas en traje de baño.
El miércoles, Don Mattia divulgó una carta enviada a la arquidiócesis, en la que explica que no quiso banalizar la eucaristía o manipularla para enviar otros mensajes.
“Fue simplemente una misa con la que se concluía una semana de trabajo con los jóvenes que participaron en el campamento”, escribió.
“Los símbolos son fuertes, es cierto, y son elocuentes (…) Hubo una cierta ingenuidad de mi parte en no darles el justo peso”, admitió.
“Pido humildes disculpas desde el fondo de mi corazón por la confusión causada por las imágenes divulgadas en los medios”, añadió.
La fiscalía de Crotone abrió una investigación por “ofensa a una confesión religiosa”.
La influencia de la Iglesia Católica sigue siendo muy fuerte en Italia y los crucifijos se ven en escuelas y tribunales.
Por su parte un diputado manifestó su solidaridad con el cura y agradeció “que lleve los valores cristianos hasta las playas”.
DiarioHOY.com.py