El Ministerio de Ciencia y Tecnología de China anunció el establecimiento de un equipo de trabajo enfocado a investigar y desarrollar las redes de sexta generación (6G) tan solo unos días después del lanzamiento comercial del 5G en el país, informan medios locales.
Por ahora, explicó el viceministro de Ciencia y Tecnología de China, Wang Xi, la investigación de la tecnología 6G «está todavía en la fase inicial de exploración», por lo que aún no se han definido claramente los indicadores clave y sus escenarios de aplicación.
El Ministerio también puso en marcha un grupo formado por 37 expertos de universidades, institutos de investigación y compañías tecnológicas para promover el desarrollo de esta tecnología y asesorar sobre las decisiones que las autoridades hayan de tomar al respecto.
Pese a estar todavía en su fase inicial, este hito marca oficialmente el pistoletazo de salida de la investigación y el desarrollo (I+D) del 6G en China, aunque en setiembre el fundador del gigante de las telecomunicaciones Huawei –empresa con más patentes relacionadas con el 5G a nivel mundial–, Ren Zhengfei, había revelado que su compañía ya estaba investigando el 6G.
Según informaron los medios chinos en noviembre del año pasado, la fecha prevista para el comienzo formal del I+D del 6G era 2020, y el año de comercialización marcado es 2030, aunque en este último comunicado del Ministerio ya no se hace alusión a objetivo alguno en términos temporales.
El 6G, según explicó entonces Su Xin, jefe del grupo de trabajo para el desarrollo del 5G dentro del Ministerio de Industria y Tecnologías de la Información, ampliaría la cobertura a altitudes aún mayores y ofrecería velocidades de transmisión de datos de hasta 1 terabyte por segundo, es decir, una velocidad diez veces más rápida que la que alcanza el 5G.
El pasado 1 de noviembre las operadoras telefónicas del gigante asiático comenzaron a ofrecer paquetes de internet móvil con redes 5G, con precios mensuales de entre 128 yuanes y 599 yuanes (entre USD 18,2 y 85,4, entre 16,5 y 77,2 euros) y velocidades de entre 500 megabytes por segundo y un gigabyte por segundo, superiores a las ofrecidas hasta ahora por las redes 4G.