El senador colorado disidente Silvio «Beto” Ovelar maniobró en la Cámara Alta para destinar como cada año un aumento presupuestario a la Universidad Nacional de Caaguazú, que está a cargo de su amigo cercano y miembro de su equipo político, el rector Hugo Giménez. En los últimos años se benefició con 21.000 millones de guaraníes a la institución.
La única institución de enseñanza pública a nivel terciario en ser beneficiada con un aumento presupuestario para el siguiente año es la Universidad Nacional de Caaguazú. El incremento establecido por el Senado en el PGN 2017 para dicha casa de estudios trepa a los 2.484 millones de guaraníes, designando así un presupuesto total de 55.900 millones de guaraníes.
Dicho monto total se desglosa para el pago de remuneraciones básicas, asignaciones complementarias, pasajes, viáticos, alquileres, combustibles, construcciones y adquisiciones de maquinarias, según reza el documento que había sido sancionado por el Congreso Nacional, pero que fue vetado por el Poder Ejecutivo.
De acuerdo a una planilla obtenida por nuestro diario, se observa que en los últimos cuatro años la universidad logró una suma extra de 21 mil millones de guaraníes en su presupuesto. En el año 2013, el aumento fue de unos G. 10.500 millones; en el 2014 fue de casi G. 2.600 millones; en el 2015 fue 4.000 millones y en este año 1.770 millones. Esto se da mientras otra es la situación en las demás instituciones educativas, según publica el portal de noticias, HOY.com.
La pregunta que surge ante esto es: ¿por qué solo se beneficia a una institución educativa y no a las demás? La respuesta sería un “trato apu’a” existente en el Parlamento, según palabras del diputado colorado Walter Harms, quien refirió que su colega, el senador “Beto” Ovelar, fue el encargado de elevar el presupuesto de la Universidad de Caaguazú.
Ovelar es vicepresidente de la Comisión de Hacienda y es asiduo participante de la Comisión Bicameral de Presupuesto, por lo que posee los mecanismos para realizar los ajustes necesarios al documento que establece el dinero a destinarse a los entes del Estado.
El legislador Harms explicó que el motivo detrás de todo se debe a que el rector de esta casa de estudios, Hugo Giménez, es amigo muy cercano del congresista citado y además forma parte de su equipo político, según acotó.
“La universidad maneja un presupuesto mayor que la gobernación del departamento. Es un feudo de los Ovelar, que ellos manejan y tienen a sus caudillos trabajando en su universidad, de ahí viene el blindaje a Hugo Giménez”, aseveraron a la 650 AM.
OTRA CONEXIÓN ENTRE AMBOS
El rector es además el contador de la Sociedad Civil Bergthal Komitee, denunciada por unos menonitas por la desaparición de US$ 5 millones. En este caso también figuró el nombre de “Beto” Ovelar, al ser citado en una conversación mantenida entre Gustavo Ovelar, defensor público de Coronel Oviedo (hermano de dicho senador) y un colono directivo de Bergthal.
En el mensaje se lee que el hermano del senador dice: “Beto (Ovelar) ya me autorizó para meter presión a Lourdes (Lourdes Soto, fiscal de Cnel. Oviedo quien había mencionado en una emisora local que el senador la llamo a presionar) y a Zelaya (Carlos Zelaya, juez penal de Garantías de Cnel. Oviedo). Nosotros somos los que mandamos en la justicia del departamento. Baby (Mario Soto, diputado departamental) no existe más. Marcelo (Marcelo Soto, ministro de la Juventud, hijo de Baby Soto) mucho menos. No van a hacer más nada. Le tienen miedo a Beto todo el mundo. No te preocupes, con la plata que dieron vamos a solucionar todo. Por Baby no te preocupes. Con Beto y con la plata se soluciona todo. Decile a los de Bergthal que se tranquilicen”.
A juzgar por el contenido de esta conversación, cobra fuerza la mención realizada por la fiscal Lourdes Soto, acerca de la presión ejercida por el el senador Ovelar en la causa Bergthal y confirma que la familia del senador se jacta de manejar la justicia en el departamento de Caaguazú.