Extendiendo los brazos y colocándose frente mismo a un tractor, doña Severiana Giménez (76), evitó que echen la precaria casa de su hijo. El hecho ocurrió en la mañana de este jueves durante un desalojo realizado en la ciudad de Caaguazú.

“Ehasa che ari”, exclamó doña Severiana, quien con los brazos abiertos evitó que la casita de su hijo sea derrumbada, tras un desalojo que fue realizado en la mañana de este viernes en un inmueble de 46 hectáreas, perteneciente a una inmobiliaria. EL lugar es conocido como Asentamiento San Miguel del distrito de Caaguazú.

La mujer manifestó a los medios de comunicación, que su esposo padece de una enfermedad y le es imposible trabajar, al igual que ella, por lo cual pidió a su hijo que pudiera vivir cerca de ellos para que los pueda asistir tras cualquier eventualidad.

En total unas 700 familias habían ingresado a este terreno, y tras cerca de un año de litigio judicial fueron desalojados. El procedimiento estuvo a cargo del agente fiscal Alfedo Mieres, donde también estuvieron presentes unos 380 agentes antimotines de la Policía Nacional.

En el lugar también estuvieron presentes representantes de Derechos Humanos, para garantizar que el procedimiento se realice conforme a lo establecido en la Ley. Durante el procedimiento no se registraron incidentes y los ocupantes abandonaron pacíficamente el inmueble. //ElPortalNoticias