Aquellas personas que se encargan de salvaguardar el orden y la seguridad de todos los ciudadanos, en varias ocasiones arriesgando sus propias vidas, ellos son los policías, quienes honran a su Santa Patrona “Santa Rosa de Lima” hoy 30 de agosto.
El 13 de junio de 1939 se instaló el 30 de agosto como el Día del Agente de Policía, por medio de un decreto firmado por el entonces presidente del Paraguay, Dr. Félix Paiva.
El decreto que llevó el Nº 14.704 decía que: “El Agente de Policía es el ejecutor directo y el representante de la autoridad ante la población; que su labor es fecunda a pesar de la modestia de su investidura en la consecuencia del orden y la tranquilidad social, que esta tarea debe ser premiada y enaltecida ante quienes son beneficiarios de ella”.
Sin embargo, la Policía necesitaba también de una santa patrona para encomendarse todos los días y poder salir a cumplir con sus labores, que en muchos casos conllevan riesgos mortales.
Entonces, el 3 de julio de 1953, el coronel Esteban López Martínez, quien era el jefe de Policía de la Capital, le solicitó al Arzobispado de la Santísima Asunción el Decreto Canónico y reconocimiento de Santa Rosa de Lima como Patrona de la Policía de Paraguay.
El 25 de agosto del mismo año, conforme al Canon 1.278 del Código de Derecho Canónico, el monseñor Aníbal Mena Porta, arzobispo de Asunción, dispone: designar a Santa Rosa de Lima, Primera Flor de Santidad y modelo acabado de Espíritu de Sacrificio, Patrona Celestial de la Policía de la Capital y sus dependencias, y celebrar la fiesta de Santa Rosa de Lima el mismo Día del Agente de Policía.
Desde entonces, cada 30 de agosto, la Policía Nacional honra a su santa patrona y también festeja su día con actos en las diferentes dependencias policiales de todo el país.