Señalado de promover valores machistas, el audiovisual no se encuentra disponible en la cuenta oficial del cantante colombiano.
Fanáticos de J Balvin denunciaron a través de redes sociales el retiro de ‘Perra’, una de las canciones que más rechazo ha provocado en distintos sectores de Colombia por promover valores como misoginia, machismo, maltrato contra las mujeres, entre otros.
El reporte, compilado por distintos medios colombianos, señala que en reemplazo del audiovisual quedó un audio con la canción, que alcanzó las 238 mil reproducciones durante el domingo 17 de octubre.
Aunque el colombiano no ha emitido comunicación al respecto, versiones como la expresada por SEMANA indicarían que fue él, a través de su equipo de PR, quien habría retirado el material por el creciente rechazo, especialmente en Colombia, por las letras y las imágenes de ‘Perra’.
El material ha suscitado opiniones negativas al más alto nivel, como el expresado por la vicepresidente y canciller de la República, Marta Lucía Ramírez, hasta judicialización al cantante por parte de la icónica feminista colombo-francesa, Florence Thomas.
La canción de J Balvin, presente en su último lanzamiento ‘Jose’ y lanzada en simultánea con la polémica sostenida con el cantautor Residente, famoso por un one hit wonder en América Latina con su agrupación Calle 13, ‘Atrévete’, abrió un debate en Colombia sobre los derechos de las mujeres.
Dos bandos enfrentados por una causa común
Como reflejo de la polarización política que vive Colombia, la primera que abrió la discusión con respecto a ‘Perra’ fue Ramírez, quien tildó la pieza de ‘Machista, racista y misógina’, con el foco en una imagen en la que Balvin sometió a unas mujeres afro que personificadas como animales, maquilladas como tal, y con collares que simbolizan el poder que el cantante tiene sobre ellas.
Las declaraciones de la vicepresidente Ramírez fueron emitidas en coordinación con laconsejera Presidencial para la Equidad de la Mujer, Gheidy Gallo Santos, quienes resaltaron que “el artista utiliza imágenes de mujeres y de personas afrodescendientes -grupos poblacionales de especial protección constitucional- a quienes presenta con orejas de perro. Además, mientras camina, el cantante lleva a dos mujeres afrodescendientes amarradas con cadenas del cuello y arrastrándose por el piso como animales o esclavas”.
Pero la radicalización política se hizo presente en lo que debiera ser una causa común como lo es la defensa de los derechos de las mujeres. La senadora, actual precandidata presidencial, María Fernanda Cabal, no se sumó al rechazo de Ramírez y otras figuras, sino que caracterizó de ‘hipócritas’ los señalamientos contra la canción de J Balvin.
Cabal aclaró que no gusta de la canción, afirmando que es práctica del género la sexualización de las mujeres, pero, en un giro argumentativo, cargó contra la oposición política, especialmente contra los legisladores de la antigua guerrilla de las Farc, ahora partido Comunes, en el Congreso.
En sus palabras: “No se puede negar que es vulgar, pero ese género siempre ha sexualizado en sus canciones y hay público para todo. Además, puedo asegurar que lo bailarán muchas mujeres. En el entretanto, el mundo sigue mudo frente a violadores y asesinos de niños y niñas en el Congreso de Colombia. ¿Hipocresía?”, cuestionó la senadora del Centro Democrático.
Con video fuera del aire, J Balvin, el artista más importante de la historia reciente de Colombia, se habría visto beneficiado de la polémica: no solo ocupa el top 10 de los artistas más escuchados en Spotify sino que anunció colaboración con la franquicia Pokemon, de Nintendo, para una canción celebratoria de su 25 aniversario.
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