Contar con al menos una dosis de la vacuna contra COVID-19, de cualquier plataforma, redujo un 50% la hospitalización, un 36% el ingreso a terapia intensiva y un 82% la posibilidad de fallecer en nuestro país.
Datos preliminares muestran que, desde el inicio de la vacunación, el 22 de febrero, hasta el cierre del mes de julio, hay un poco más de 36% de personas vacunadas, con al menos una dosis de anticovid, lo que representa a un tercio de la población objetivo. Este tercio es el de la población más vulnerable.
En uno de los últimos análisis que viene realizando la Dirección General de Vigilancia de la Salud, se muestra el impacto de la vacunación, con una dosis, contra COVID-19.
En este caso, el análisis corresponde al periodo de abril a julio, en la población de 60 años de edad en adelante. Este grupo representa el 70% de la mortalidad por el COVID-19 en el país. En este lapso y en esta población, hubo 36 mil infectados con COVID-19. De estos, el 55% de infectados ya contaba con una dosis de vacuna anticovid, y el 45% de los contagiados aún no había recibido la vacuna.
La diferencia radica en que:
Del 55% o 20 mil personas infectadas, que contaban con la primera dosis, se hospitalizó el 19,8%, el 8,8% fue a terapia intensiva y falleció el 5, 9%.
Del 45% o 16 mil infectados, que no contaban con la vacuna, se hospitalizó el 39,8%, el 13, 1% fue a terapia intensiva y falleció el 32,1%.
El impacto de la vacunación
Independientemente de la plataforma de la vacuna que se reciba, sea la plataforma que sea, contar con al menos una dosis de la anticovid reduce en la población de 60 años en adelante:
– 50% de hospitalización.
– 36% el ingreso a terapia intensiva.
– 82% la muerte.
Este tipo de análisis se seguirá realizando en otros grupos de edad, y también, sobre la inmunización con las dos dosis.