Las autoridades intensificaron las medidas de seguridad en la cárcel de Minga Guazú luego del segundo sobrevuelo de un dron. A pesar de la falta de tecnología para rastrear estos dispositivos, se están tomando precauciones adicionales para proteger el penal y prevenir futuros incidentes.
Al respecto, el comisario principal, Miguel Pérez, jefe de Prevención de la Policía en Alto Paraná, comentó sobre los recientes eventos en el penal de Minga Guazú. El incidente más reciente ocurrió el martes último, a las 19:00 horas, cuando un dron sobrevoló la estructura de la penitenciaría, que es considerada de alta seguridad por el Ministerio de Justicia.
Este episodio sigue al primer incidente similar ocurrido la noche del domingo anterior. Ambos eventos generaron preocupación por la seguridad del penal, especialmente debido a la imposibilidad de la policía local para identificar o rastrear el dron debido a la falta de tecnología adecuada.
En ese contexto, el jefe policial explicó que, a pesar de la falta de herramientas tecnológicas específicas para el control de drones, se están tomando medidas adicionales de seguridad. Esto incluye la presencia de más efectivos policiales y patrulleros en la zona de manera constante para aumentar la vigilancia.
Así también, el comisario destacó la necesidad de instalar un sistema de inhibición de señales en el penal para prevenir el vuelo de drones. Esta medida se sugiere como una solución similar a la que se utiliza en el aeropuerto Guaraní, situado a 6 kilómetros del penal.
Cabe mencionar que la cárcel de Minga Guazú alberga a figuras notables del crimen organizado, como el narco Miguel Insfrán, conocido como “Tío Rico”, y miembros de la organización criminal “Primer Comando da Capital (PCC)”.
La situación subraya la urgencia de mejorar las medidas de seguridad en el penal para enfrentar los desafíos representados por la tecnología moderna, como los drones, que podrían comprometer la seguridad de los reclusos y del establecimiento penitenciario en general.