Gregorio Aguilar, denuncio que un local de Zumba, ubicado sobre la avenida Jaime San Just, perteneciente a Gabriela Itati Galeano Luchini, de manera diaria ponen música en alto volumen que molesta a los vecinos que están cerca del lugar.
Refirió que fue a reclamar incluso a la fiscalía y que hasta el momento no se ha dado solución al problema. Además refirió que su esposa y él ya no están en condiciones de soportar tanto barullo que no les deja vivir en paz.
Gregorio Aguilar, dijo que por ley todos los locales deben adecuarse y no molestar con ruidos a los pobladores.
“La música es muy molesta, además son músicas que yo considero satánicas”, expuso el poblador, quien pidió a las autoridades que se resuelva y se regule.
“Yo iré a la Junta Municipal a quejarme de esta situación”, acotó.
Por su parte la propietaria del local de Zumba, Gabriela Itati Galeano Luchini, refirió que la vivienda de Aguilar está cruzando la calle y que es el único que se queja de la música que estaría regulado.
La propietaria manifestó que incluso los vehículos que pasan de manera constante por la céntrica avenida suena con mayor intensidad que la música del local de Zumba.
“Yo he conversado con los vecinos y les consulté si les molesta la música y todos me dijeron que no, incluso el señor que vive en el departamento de arriba explicó que no escucha la música”, subrayó.
Refirió que esperará que la fiscalía actúe y se demuestre si realmente su local molesta con ruidos tal como refiere Aguilar.