Gremios del sector empresarial repudiaron los constantes cortes de energía eléctrica, de los cuales responsabilizan a la ANDE, y expresaron su preocupación por las pérdidas económicas y el parón en la producción.

La Unión Industrial Paraguaya (UIP), que aglutina a varias empresas e industrias de nuestro país, expresó su cuestionamiento a raíz de los sucesivos cortes en el suministro de energía eléctrica que se vienen registrando esta semana.

“Desde el ámbito industrial, expresamos nuestra profunda preocupación ante los frecuentes eventos de cortes y pestañeos en el sistema eléctrico de nuestro país, en plena ola de calor, que impacta negativamente en las líneas de producción automatizadas y procesos de producción continuos, provocando daños y destrucción de equipos electrónicos debido a las fluctuaciones de tensión”, menciona el comunicado divulgado este viernes.

Asimismo, mencionan que las industrias que integran dicho gremio reportan millonarios daños en maquinarias y equipos, además de pérdidas en la producción, a causa de los constantes pestañeos y cortes en el suministro de energía eléctrica.

Otro de los que sentó posición es la Cámara Paraguaya de Supermercados (Capasu), que repudió los continuos cortes de luz que se dieron en los últimos días, afirmando que “la ineficiencia de la ANDE causa un grave daño a todo el país”.

En la misma línea que la UIP, los supermercadistas sostienen que esta problemática genera un impacto negativo tanto en las empresas como en la ciudadanía en general, provocando pérdidas económicas significativas y la interrupción de procesos productivos, además de dañar maquinarias y equipos y causar la pérdida de productos almacenados.

“Las familias se ven afectadas por la interrupción de servicios básicos, la pérdida de alimentos debido a la falta de refrigeración, las incomodidades generales y la afectación a otros servicios básicos”, añade el comunicado de este gremio.

Tanto la UIP como Capasu coinciden en la necesidad urgente de mejorar el sistema eléctrico y la infraestructura, responsabilidad que recae directamente sobre la ANDE, a quien exigen aumentar el nivel de inversiones para atender la creciente demanda de energía que posee el país.

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