Autoridades confirmaron que los restos encontrados en Boquerón, Chaco, corresponden al niño indígena Alberto Díaz Agustín. Además, el médico forense determinó que este falleció por desolación.
Alberto Díaz Agustín, de la comunidad Kenjakloy, fue encontrado sin signos de vida el lunes en la estancia 5 Estrellas de Boquerón. El menor había sido reportado como desaparecido el pasado 2 de enero.
El médico forense de Filadelfia inspeccionó los restos y, tras confirmar la identidad, determinó como la causa de muerte shock hipovolémico por desolación. El profesional indicó que el niño murió de sed, informó Telefuturo.
Según los datos, el niño fue al monte para cazar palomas para llevar alimento a su casa y ya no volvió más. A partir de ese momento, familiares, vecinos y la Policía Nacional iniciaron una intensa búsqueda.
La última vez que lo vieron vestía una camiseta del club Olimpia número 27 en la espalda y short negro con unas pantuflas.
Según el fiscal que investiga la causa, Andrés Arriola, de Filadelfia, el niño era especial y estaba siempre bajo cuidado de los padres, pero el día en que desapareció aparentemente mientras sus familiares fueron a la iglesia él se escapó de la casa.
La versión de los demás vecinos es que suele ir cerca de un tajamar para cazar palomas para el sustento familiar ya que en épocas de sequía no cuentan con cultivos.
El ciudadano Jacob Kroker Derksen, propietario de la estancia 5 Estrellas, ubicada sobre la Línea 9, colindante con la comunidad indígena Kenjakloy, informó que el cadáver fue hallado por su personal.
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