Un trágico accidente causado por un cable suelto el 25 de septiembre pasado cambió para siempre la vida de una mujer, quien quedó sin pierna izquierda por una negligencia. Hoy, a casi un mes del accidente, la víctima pide justicia.

Liz Paola Gómez es la mujer que, luego de un accidente en motocicleta con su pareja en barrio Obrero, perdió la pierna.

“Recuerdo que, pasando el semáforo de Cuarta y Tacuarí, de la iglesia Perpetuo Socorro, veo un cable y le aviso a mi pareja, pero ya sobre la macha, no nos dio tiempo de esquivar y el cable se enreda por mí, por él y por la moto y ahí la moto cae sobre mi pierna”, relató Paola, en una entrevista con radio Universo 970 AM-Nación Media.

Cuando quedó en el suelo boca abajo, Paola sintió un dolor inmenso e intentó mover los pies, pero no le respondían. Allí supo que algo muy grave pasaría.

El fiscal de la causa es Aldo Cantero, pero hasta el momento no se tiene el dato de la empresa responsable del cable ni de las personas que vinieron a recogerlo unos cuatro días después del accidente.

“Queda a la vista un trabajo mal hecho y la nula fiscalización de la gente que debería estar cobrando, un cable en medio de la calle nos llevó a un hecho trágico, si bien estoy viva y con mucha actitud, perder una pierna no es cualquier cosa”, lamentó.

Este no es el primer ni el único caso de hechos trágicos con cables sueltos. En otro caso, una mujer casi fue decapitada por uno de estos cables. Su cuello quedó con heridas profundas y hasta ahora tiene dificultades hasta para ingerir líquido.

//Hoy.com.py.

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