El ministro de Salud, Julio Borba, manifestó este martes que se encuentra satisfecho con el avance de la vacunación contra el Covid-19 en Paraguay, ya que un 30% de la población accedió a las dosis. La cifra era la meta para este fin de año.
Los datos de Salud Pública precisan que un total de 1.936.166 personas ya recibieron al menos la primera dosis contra el Covid-19, lo que representa cerca del 30% de la población del país.
“Creo que estoy satisfecho, porque (esa cifra) era nuestra meta hasta antes de fin de año, pero yo creo que vamos a llegar a más”, respondió Borba tras ser consultado por Monumental 1080 AM acerca de su conformidad con el avance de la vacunación.
En principio, el objetivo de Salud era llegar a la inmunización del 30% de la población en el 2021. Sin embargo, las expectativas aumentaron ante la concreción de nuevas compras de vacunas y la colaboración de otros países a través de donaciones.
Durante la última semana, Salud habilitó la vacunación para jóvenes de 20 años en adelante. La población de esa franja etaria mostró muy buena participación en los vacunatorios.
No obstante, durante el fin de semana se percibió cierto relajamiento por parte de la ciudadanía en sitios públicos y algunos locales gastronómicos.
Al respecto, el ministro Borba mencionó que se trata de una cuestión de consciencia y autocuidado, ya que desde la cartera sanitaria se insiste constantemente en la necesidad de mantener los cuidados preventivos.
“Ya venimos diciendo hasta el hartazgo y lo digo más de una vez, no quiere decir que si estamos vacunados somos como Highlander (inmortales). Tenemos que seguir cuidándonos entre todos”, mencionó.
El ministro comparó que la misma situación se ve en todos lados, incluso dijo que en Estados Unidos al parecer no pasó nada, ya que la gente no utiliza tapabocas y es una vida totalmente diferente pese a que solo el 50% de su población está vacunada.
“Tenemos que tener mucho cuidado, porque esto puede provocar otra explosión de contagios”, concluyó.
La situación sanitaria en el país muestra un descenso importante de casos de coronavirus y de internados, lo que da un respiro a los hospitales tras cuatro meses de estar colapsados. No obstante, las autoridades alertan que esa situación puede cambiar si no se tienen en cuenta los cuidados.
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