La ministra de la Niñez y Adolescencia, Teresa Martínez, sostuvo que hay una imperiosa necesidad de que la educación sexual integre la malla curricular. Expresó que los docentes son parte fundamental en el proceso.
“La educación sexual integral es un derecho que tienen niñas, niños y adolescentes. Tienen que tener información veraz, confiable y cientifica de qué ocurre de sus cuerpos cuando van creciendo”, dijo la ministra Teresa Martínez, durante el lanzamiento de la campaña “Ñañangareko”, para prevenir el abuso sexual infantil.
Sostuvo que es importante que los niños sepan de los límites que tienen que tener los adultos sobre los cuerpos de ellos.
Asimismo, dijo que los docentes son grandes detectores de las vulnerabilidades que puedan llegar a pasar los niños y por eso es importante que apoyen desde las aulas.
“Necesitamos que esto se apropie en las aulas y que los niños reciban la información que tienen que recibir”, agregó la secretaria de Estado.
La activista Lilian Soto, celebró la postura de la ministra. “Por fortuna, algunas personas de este gobierno sí saben que el fundamentalismo causa daño”, tiró.
La campaña “Ñañangareko” está orientada a la prevención del abuso sexual en niñas y adolescentes que tiene como consecuencia el resultado de un embarazo precoz.
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