Con la voz quebrada, encomendó el país a «Jehová», al finalizar su segundo informe de gestión.
Mario Abdo Benítez brindó en la mañana de este miércoles un informe sobre su gestión en la Presidencia, despertando comentarios de indignación especialmente por la deuda de 1600 millones de dólares que adquirió el Estado por la pandemia de coronavirus.
Hacia el final de su comunicado, Marito dedicó varios minutos a la importancia de la fe. “Quiero pedirle a cada paraguayo y paraguaya que sea protagonista, que se involucre con sus críticas, con su apoyo, que impulse y que impulsemos juntos la verdadera transformación, que me acompañe con su oración y con su actitud diaria para poder acabar con la corrupción, con la desigualdad, con el egoísmo y así levantar lo mejor de nosotros”
Emocionado, Marito cerró la reunión virtual con los congresistas aguantándose las lágrimas al pronunciar lo siguiente: “La palabra dice ‘encomienda a Jehová tu camino, confía en él y él hará’. Hoy encomiendo el camino del Paraguay a Dios, declarando su reactivación económica, progreso, unión, estabilidad, reconciliación”.
En cuanto a la deuda, el presidente señaló que 94.000 millones de dólares fueron destinados a Salud, de los cuales, 4.000 fueron invertidos. Señaló que el monto es menor debido a que el Ministerio hizo uso de sus fondos. Lo que no parece muy convincente en las redes sociales, debido a que en los hospitales no se cuentan con los insumos para la lucha contra la Covid-19.
Habló sobre los pagos de subsidios de IPS, Pytyvõ, Tekoporã y otros pagos transferidos por el Ministerio de Hacienda, pero olvidó a los miles de compatriotas que quedaron sin trabajo en los últimos meses.
// Fuente – EXTRA
