El obispo Ricardo Valenzuela, en la celebración central de la misa de Caacupé, pidió abrir el camino de la compresión y esperanza, “Es necesaria la eucaristía que son las ofrendas del corazón en Cristo, es necesaria la justicia contra todo tipo de corrupción espiritual y legal” dijo.

La pandemia afecto toda la vida de las personas pero afecto mas a los débiles, en el Santuario de Caacupé traemos nuestras cargas, dolores y perdón.

Por otro lado dijo que; “La virgen María es la única mujer divina porque recibió la gracia del espíritu santo, por medio de un milagro para concebir al hombre más importante del universo a Jesús”. María realizó el amor sin manchas porque concibió a Jesús por obra y gracia. La virgen María era verdaderamente pura y casta porque es la madre de Jesús. Dios nos ama de una forma inexplicable porque envió a su único hijo Jesús para limpiar nuestros pecados y salvarnos del fuego del infierno.

“Vivimos una época instaurado por el odio y el pecado, hablan del aborto que atenta contra la vida y la familia de Cristo, estamos ciegos para pensar en legalizar matar una criatura en el vientre de su madre no te tenemos derecho, solo Dios tiene el poder de sacar la vida, porque somos sus hijo y el nos ama profundamente, pero somos tan duros de corazón que no le hablamos, a sabiendas que Dios nos extraña con su inmensa misericordia”, finalizó.