SANTA ROSA DEL MBUTUY, Dpto. Caaguazú (Por: Néstor Ojeda Mendoza).- Durante la misa central celebrada por el obispo de la diócesis de Coronel Oviedo, el Monseñor Juan Bautista Gavilán, se refirió a los ochos mártires de las fuerzas militares acribilladas por el grupo criminal Ejercito del Pueblo Paraguayo (EPP). Dijo que «la paz no está por el camino de la violencia, más bien, la paz se construye, se trabaja, se vive y no se impone por la fuerza». Además señaló que la edificación de la patria, y la unidad de la familia no está en la violencia, sino, está en la construcción constante y permanente a través de la concordia.
En otro momento relacionó la vida del cristiano, dijo que la iglesia al dar la eucaristía no mira o no hace diferencia en quien está recibiendo, cosa que en la práctica de la conducta humana no se adecua a los medios o los preceptos cristianos, debido a que la persona, el que se hace llamar cristiano, su conducta no condice con los ejemplos y el camino dejado por nuestro Dios, Jesucristo.
El oficio religioso, celebrado en forma conjunta con el párroco local, Hipólito Gavilán Burgos, en honor a la patrona de la comunidad, Santa Rosa de Lima, a quien pidió interceder por la concordia y la unidad de las familias del lugar, y del Paraguay.
En otro momento, el obispo Gavilán indicó que los paraguayos necesitamos darnos más a Dios en amor por medio de nuestro comportamiento como humano y en nuestra condición de verdaderos cristianos, para así construir en unidad una familia y una nación más fortalecida.
Por último, manifestó que el tesoro real para una sólida construcción de la familia es el amor al prójimo, a ese servicio desinteresado al hermano, que es la imagen y semejanza de Jesucristo. Esto refiriéndose a un senador de la República del cual no dio nombre, sobre un caso relacionado al tratamiento de un tema que supuestamente iba a beneficiar su promulgación al pueblo, pero que no fue acompañado por este legislador, ante el compromiso contraído con su patrón financista de su campaña política, lo cual iba de contramano contra los intereses de su patrón.
Culminado el oficio religioso, se realizó la tradicional procesión de la santa patrona, por las principales arterías del casco céntrico de la ciudad.