La atención está abierta para todos los interesados. Foto de la Facultad de Odontología, Facebook.

Los dientes de leche cumplen importantes funciones en el crecimiento del niño, además si alguna muela está picada, esta podría afectar directamente a su autoestima.

El Dr. Robert Núñez, pediatra, publicó en su cuenta de Twitter que los padres deben tener especial cuidado con los dientes de sus hijos.

Contó que una niña llegó a la consulta porque tenía muchos mocos, pero al revisarla, vio también que tenía muchas caries, cosa que le mencionó a la mamá. Ésta le respondió que los mismos son de leche y que tarde o temprano se van a caer, a lo que le pregunta al especialista si importa o no.

Claro que sí importa”, respondió, explicándole que, no es que la niña tenga los dientes negros sino que son caries y que no son inofensivos para su salud. Además, dijo que ningún niño debe andar con los dientes picados, ya que daña su autoestima y no faltará, “se los aseguro, el inconsecuente niño o adulto que lo moleste por eso”.

En ese contexto, el médico indicó que los dientes de leche ayudan a los niños a masticar y a deglutir los alimentos, hecho que no es poca cosa, también los ayuda para hablar y pronunciar bien las palabras, es decir, son fundamentales para el lenguaje.

No es necesario explicar lo importante que esto resulta para su aprendizaje y su desarrollo. Las piezas dentales definitivas que están por debajo, pueden resultar afectadas por las bacterias que causan las caries de los dientes de leche, causando manchas y daño en el esmalte”, especificó.

Asimismo, señaló que la pérdida prematura de los dientes de leche a causa de las caries puede condicionar que los dientes definitivos salgan chuecos-

A su vez, refirió que la leche materna no provoca caries a ninguna edad. De hecho tiene un factor de protección contra las mismas, de modo que esos dientitos agradecerán que se prolongue la lactancia.

Por último, dicen los odontólogos pediatras que debes lavar los dientes del pequeño desde el momento en que aparecen, con una cantidad de pasta equivalente al tamaño de medio granito de arroz, y ellos sí saben, así que:¡A hacerles caso!. No te olvides de llevar a tus hijos con el odontólogo pediatra tan pronto se asome su primer diente”, puntualizó.