La salud individual se ve impactada por la calidad de las relaciones interpersonales. La violencia afecta no solo a quien la recibe, sino a quien comete el hecho y, en suma, a toda la sociedad.
El impacto de las distintas formas de violencia deja secuelas no solo físicas, sino que va mucho más allá, afectando las dimensiones emocionales, psíquicas y cognitivas de las personas. Causa también depresión, ansiedad y otros trastornos de salud mental, que pueden inducir a una muerte temprana o mala salud durante toda la vida.
El enorme impacto de la violencia, no percibida como tal en la mayoría de las ocasiones, sino manifestada por otros trastornos que llegan hasta los servicios asistenciales, dedica mucho tiempo y recursos para el sector salud.
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura UNESCO, reconoce que la paz no es solo la ausencia de conflictos, sino también, un proceso destinado a la solución de los mismos.
Igualmente, insta al mundo en la necesidad de tomar conciencia y adoptar una cultura de No Violencia, con lo que se exige la participación de todos en este cambio evolutivo, en el cual se incluyen una serie de principios que ayudarán a forjar un mundo más justo, más solidario, más libre, digno y armonioso, y con mejor prosperidad para todos. El país debe ser uno libre de conflictos, corrupción, y cosas negativas que afecten a las personas y al futuro.
“La violencia es un problema de salud pública que limita el desarrollo social y económico de las sociedades” (OPS, 2002).
Ante los conflictos bélicos y sociales que nos afectan actualmente, es importante retomar, en especial por este 7 de abril, día en el que se conmemora el “Día Mundial de la Salud”, la Declaración y Programa de Acción sobre una Cultura de Paz, que manifiesta:
• Rechazar la violencia.
• Manifestar la generosidad mediante actos.
• Contribuir al desarrollo de mi comunidad.
• Preservar el planeta.
Cabe resaltar que la violencia es prevenible, siendo la manera más eficaz la promoción de relaciones respetuosas. Es posible trabajar pautas saludables.
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