Un niño de 8 años de edad, oriundo de la ciudad de Coronel Bogado, Itapúa, sufrió la amputación de parte de uno de sus dedos, tras la explosión de un petardo en Año Nuevo.
Un nuevo caso de lesión por uso de petardos se registró en el departamento de Itapúa, teniendo (una vez más) a un menor de edad como víctima.
Se trata de un niño de 8 años, quien sufrió una grave herida en la mano derecha tras la explosión de un fuego pirotécnico.
El menor -oriundo de la ciudad de Coronel Bogado- fue derivado al Hospital Regional de Encarnación, donde procedieron a la amputación de parte del dedo anular.
“Lamentamos este sucesos y apelamos a la conciencia y los cuidados cuando se da la manipulación por parte de menores”, expresó el Dr. Jorge Ayala, director del hospital.
Los médicos harán un minucioso seguimiento para evitar consecuencias como una eventual infección ósea, la pérdida de fuerza o una alteración de la función, indicó la corresponsal de Nación Media, Rocío Gómez.
En estos momentos, el pequeño paciente permanece internado en una sala común y sería dado de alta en las próximas horas.
