Este lunes, grande fue la sorpresa de un hombre al ver que unos billetes de 100 mil guaraníes volaban en plena calle de la ciudad de Asunción. Estos salían de una billetera que estaba tirada en plena avenida Eusebio Ayala que contenía en su interior la suma de G. 11.500.000 y dos chequeras. Esta persona no dudo en devolver el dinero.
Este gran acto de honradez y más que digno de imitar fue realizado por don Isaac Pérez, quien siempre se dijo a si mismo, que si alguna vez encontraba dinero en la calle iba a buscar a su dueño hasta agotar las instancias. “Siempre dije que si llegaba a encontrar dinero lo devolvería porque no me pertenece. La verdad que necesito dinero, no niego, pero no es mío y preferí entregarle al dueño”, dijo en entrevista con Unicanal.
Resaltó que todo fue tan inesperado y que no dudó nunca en buscar a su dueño, ya que se puso en lugar de esta persona que perdió esta importante suma de dinero y que le gustaría que, si alguna vez pasa por lo mismo, se lo devuelvan. “Vi los billetes de G. 100 mil tirados y vi que había una billetera tirada en el costado, agarré y dije que quería encontrarle al dueño para entregarle”, relató.
El hombre no sabía cómo dar con el dueño de esta importante suma de dinero y los demás documentos que estaban en esta cartera, entonces, decidió llegar hasta el estudio de Unicanal donde fue ayudado y mediante datos del banco contactó con Ramón Montanía, quien no creyó que el dinero sería devuelto.
“Yo fui al banco y tenía un maletín por lo visto que se me cayó. Le agradezco mucho a este señor por devolverme el dinero y lo que más me preocupaba era que tenía un cheque ya firmado por más de 10 millones que era para pagar el IPS de los trabajadores de la empresa”, dijo.
Resaltó en total se le cayeron 13.000.000 de guaraníes, pero al parecer los fajos ya habían perdido varios billetes que se dispersaron sobre la avenida y en total se encontraron G. 11.500.000. “Agradezco profundamente porque ese dinero ya lo daba por perdido y lo que me preocupaba eran los cheque ya que contenía mi firma y podían ser falsificados”, concluyó.
Cabe destacar que este acto heroico del hombre fue compensado por el propietario, quien, además, no tuvo palabras para agradecer tan valiente acto y aseguró que no todo está perdido en el país tras conocer a una persona que aún practica los valores que caracteriza a los paraguayos.
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