El diputado Portillo, Sindulfo Blanco, ministro de la corte y su hijo Rodrigo Blanco. Foto ABC color.
La fiscala Liliana Alcaraz imputó ayer por cuatro hechos punibles al diputado liberal Carlos Portillo, entre ellos tráfico de influencias y cohecho pasivo (coima) y solicitó su desafuero. El escrito detalla cómo se exigió US$ 3.000 dólares a una procesada por estafa, a cambio de un fallo.

La imputación contra el parlamentario es por los hechos punibles de tráfico de influencias, soborno, asociación criminal (todos en calidad de autor) y cohecho pasivo (como cómplice).

La agente del Ministerio Público, Liliana Alcaraz, también formuló imputación contra la abogada Lucía Ramona Escobar como autora de asociación criminal y cómplice de soborno y tráfico de influencias.

La fiscala explica que la causa fue abierta de oficio a raíz de publicaciones periodísticas realizadas por ABC Cardinal referentes a la difusión de audios en los cuales se escucha al diputado Carlos Portillo conversando con una mujer acerca de la obtención de una resolución favorable a un caso judicial, y en el que la persona de sexo femenino le menciona: ¿Cómo te puedo enviar …Depósito, giro, entrega? A lo que el diputado le responde: “…Voy a ver si alguno de mis familiares o amigos puede acercarse…”.

La investigadora se constituyó el jueves de la semana pasada en Ciudad del Este y tomó declaración testifical a la que sería víctima del “apriete” del parlamentario liberal y la abogada Lucía Escobar.

En ese sentido, Auda Fleitas ratificó que le pidieron US$ 3.000 para arreglar una causa en su contra abierta por estafa y producción de documentos no auténticos.

La situación se dio en junio del año pasado, luego de que la abogada Lucía Ramona Escobar presentase al diputado Portillo a Auda Fleitas.

La grabación de la conversación telefónica sin embargo fue en agosto del año pasado, cuando Portillo le confirmó a la denunciante que consiguió una resolución a su favor en la Cámara de Apelaciones de Alto Paraná.

Acto seguido a esa llamada, la abogada Escobar se comunicó con Fleitas y la misma le dijo que “en la justicia no se gana sin plata, y que venda lo que sea para poder salir del problema”. Argumentó que miembros del Tribunal de Apelación le pidieron supuestamente al diputado Portillo la suma de US$ 3.000.

Unos días después, según declaró Auda Fleitas, el propio parlamentario le llamó requiriendo el dinero porque ya había abonado de su bolsillo. Esa conversación fue la difundida ampliamente debido a que la mujer sondeó para que sea un “giro” o “depósito”, pero Portillo solo aceptó enviar a su chofer de nombre Fernando, a quien debía entregar el dinero.

Esa persona se comunicó asimismo con Fleitas, luego la mujer comentó el hecho a su abogado Mauro Barreto, quien le recomendó que no pague dinero alguno y que ya no conteste las llamadas y mensajes telefónicos.

Desafuero y arresto

En su imputación, la fiscala Liliana Alcaraz pide el desafuero del diputado liberal Carlos Portillo, que debe ser expedido por el juez Gustavo Amarilla, debido a que interina a su colega Julián López (sorteado en el caso) durante la feria judicial. La agente solicita arresto domiciliario para el parlamentario y la abogada Lucía Ramona Escobar Santacruz ante peligro de obstrucción a la investigación. También requiere prohibición de salir del país y una caución real (inmueble) que el juzgado considere pertinente.

Fuente ABC color.