Luego de que familiares de Guillermo Moral hayan solicitado que investiguen a su esposa, Lourdes Duarte negó las acusaciones y aseguró que se busca desviar la atención en la investigación. “Me quieren poner a mí como la mala”, dijo.

La esposa y viuda del teniente coronel Guillermo Moral, asesinado por sicarios, el pasado 2 de octubre, frente a la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Asunción (UNA), habló con Radio Monumental 1080 AM sobre el pedido de investigación de la familia del uniformado. Respondió a las acusaciones negando cualquier implicancia y asegurando que, desde un principio, se prestó a colaborar con la investigación.

La abogada de la familia de Moral, Nadia Pintos, manifestó el martes que una línea de conducta de Lourdes Duarte, debe ser investigada. Se trata de tomas fotográficas realizadas por la esposa a la camioneta del militar, frente a Derecho UNA, cuando se encontraban separados.

“Esta conducta le llamó la atención al propio Guillermo, quien envió la foto de esa escena a su hermano (Víctor Moral), pidiéndole que pueda ayudarle a la salida de la facultad porque ella estaba rondando el vehículo suyo”, fueron las palabras la abogada.

“Yo desmiento totalmente las acusaciones de mi cuñado y ahora me doy cuenta de que él fue el que destruyó nuestro matrimonio”, respondió este miércoles Lourdes Duarte, quien además aclaró que seguía siendo la esposa del teniente coronel, ya que nunca gestionaron el divorcio y solo estaban separados.

Específicamente, sobre las fotos que realizó a la camioneta de Moral en las cercanías de la Facultad de Derecho, en el barrio Trinidad, Duarte dijo que lo hizo “para decirle a mis hijas ‘tu papá está acá, escríbanle’”. “Esa conjetura es un absurdo”, dijo además.

“Acá yo voy a acusar a Víctor (Moral) y a Florencia (esposa de Víctor) de cualquier intento que a nosotros nos ocurra. Yo soy la viuda. Mi hija está a punto de entrar a su colación. ¿Yo piko voy a querer matar a mi marido, que tenía que acompañarle a la colación a mi hija, dentro de un mes? Dentro de un mes que es su cumpleaños, que es mi cumpleaños. Es la más absurda hipótesis que existe (Sic)”, sostuvo Duarte.

La abogada también aseguró que hay dos denuncias por violencia familiar de parte de Moral hacia su ex esposa, que se encuentran en el Juzgado de Paz de Ypané, donde fijó su último domicilio.

Respecto a dicha versión, Duarte respondió que “no existen dos denuncias”, y detalló que “solamente fue una restricción en el 2023 y yo tengo la copia del levantamiento” de dicha restricción.

Duarte también señaló que el hermano de Guillermo Moral, Víctor, sabe sobre el levantamiento de restricción. “Víctor acompañó a su hermano a la escribanía para el levantamiento. Y yo tengo el último finiquito en Ypané. Porque Guillermo y yo siempre volvíamos”, indicó.

“Esa segunda denuncia quiero saber cuál es, porque es un invento nada más. Están queriendo desviar la atención de los investigadores, de los funcionarios”, agregó la mujer.

“Me quieren poner a mí como la mala, y es un chivo expiatorio nada más”, sostuvo Duarte en la charla con Radio Monumental.

No se divorciaron
Lourdes Duarte
también se refirió a la separación de hecho que tenía con su esposo y por qué no se divorciaron. “No se hizo el divorcio porque él quería llegar a general. Y la única forma que él limpie su hoja de vida, porque yo le hice una demanda por prestación, es volviendo con su familia. Eso se tiene muy en cuenta para ser general, volver con su esposa. Por eso nunca se hizo el divorcio”, detalló.

Sin embargo, también dijo que siempre volvían, y que estaban en ese proceso cuando Moral fue asesinado. “La última vez casi volvimos, que fue en mayo, en la facultad. Siempre nos abrazábamos y siempre nos veíamos, siempre nos saludábamos”, aseveró.

“Yo lo que pienso es que Víctor y su familia quieren la casa, la última que él construyó. Que era nuestra casa de fin de semana”, señaló además la mujer.

Se puso a disposición de la Fiscalía
Duarte
explicó además que la misma noche del asesinato, ella se comunicó con la Fiscalía y se puso a disposición, entregando su teléfono celular y el circuito cerrado de la casa. “Si yo tenía algo que esconder, no iba a dar teléfono y el circuito cerrado. En el momento les di”.

“Yo no iba a denunciarle a Víctor por la salud de Ña Jacinta, porque pienso en mi suegra, pienso en mi suegro, pienso en mis hijas, pero voy a tener que denunciarle, porque si algo nos ocurre a mí o a la integridad de mis hijas va a ser por irresponsabilidad de él, de hacer acusaciones sin fundamento”, expresó Duarte.

“Acá hay que buscar a los verdaderos asesinos, no llevar por las ramas”, dijo la esposa del militar fallecido.

Por último, ante la consulta de hacia dónde cree ella que debe apuntar la investigación, respondió: “Estos son poderosos, los que le mandaron hacer. Porque yo sé que en su celular existen muchas amenazas. Inclusive que era vigilado en la casa de Ypané”.

El jefe militar fue ultimado el pasado jueves 2 de octubre, en inmediaciones de la Facultad de Derecho de Universidad Nacional de Asunción (UNA), en el barrio Trinidad de la capital, cuando llegaba para dar clases.

El uniformado se había negado a aceptar un soborno de G. 10 millones para introducir un teléfono celular en la celda de Miguel Ángel Insfrán, alias Tío Rico, presunto narcotraficante que se encontraba recluido en la cárcel militar de Viñas Cué.

//Ultimahora.com.


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