La exministra de Hacienda, Lea Giménez, dijo que la economía del país se encuentra estancada y en punto muerto por la falta de una conducción clara del Gobierno en establecer políticas que pueda ayudar a la gente para salir de la crisis.
“Como una paraguaya más veo preocupante esta situación, la economía está estancada, no arranca, estamos en punto muerto total, y no muestra señales muy positivas este año”, dijo al momento de resaltar que el reflejo de la problemática se corrobora con los datos arrojados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) al primer trimestre del 2022, los cuales muestran que una gran cantidad de personas se quedó sin empleo en medio de una crisis económica, golpeada por la inflación y menores ingresos.
El INE revela que el nivel de desocupación en la actualidad está alcanzando el 8,5%, cuando antes de la pandemia se tenía un 6,5%. Eso es en cantidad numérica 317.000 personas, de las cuales 160.000 son varones y las mujeres son 156.000 desocupadas.
La economista Giménez sostuvo en charla con Nación Media que no se encuentran formas para solucionar la disparada de precios en los productos de la canasta familiar. “Hay una ausencia total del Gobierno en materia de políticas que podrían ayudar a las familias para que puedan salir adelante”, cuestionó.
Expuso que el presidente Mario Abdo Benítez no debería tirar la toalla y dejar todo a manos del próximo Gobierno. “Es lamentable que no haya propuestas. A este Gobierno le queda un poco más de un año y no deberían haber tirado la toalla y dejar para el próximo gobierno. Necesitamos que alguien guíe el rumbo del país, no podemos estar sin capitán”, agregó.
Respecto al aumento del salario mínimo, la economista argumentó que esta medida devuelve el poder adquisitivo a tres de cada 10 trabajadores, por lo que no tendrá un gran impacto. “El salario debe ajustarse, pero beneficiará a pocos y perjudicará a muchos. Acá debemos ver qué hacer para recuperar el poder adquisitivo de todos los paraguayos”, dijo.
Giménez subrayó que en los últimos cuatros años se observó la caída en el salario promedio del trabajador paraguayo porque el PIB no crece a la velocidad esperada y por los malos años que tuvimos recientemente en materia económica.
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