El cónclave para elegir al sucesor de Francisco comenzará el próximo 7 de mayo en la Capilla Sixtina. La primera votación se llevará a cabo la tarde tras la misa “pro eligendo Pontifice”.

Los cardenales de la Iglesia Católica decidieron el lunes que el 7 de mayo iniciarán las votaciones para seleccionar al sucesor del papa Francisco.

Los llamados “príncipes de la Iglesia” se encerrarán desde ese día en la majestuosa Capilla Sixtina para elegir al nuevo líder espiritual de 1.400 millones de fieles, y no podrán salir hasta que la fumata blanca preceda el esperado “Habemus Papam”.

Es un proceso que ha despertado fascinación desde hace siglos.

El cónclave que llevó a la elección de Francisco en 2013 tomó dos días, la misma duración del de su predecesor, Benedicto XVI, ocho años antes.

El jesuita argentino falleció hace una semana y el sábado fue enterrado tras un solemne adiós en presencia de líderes internacionales y de 400.000 personas.

La fecha se definió en la quinta reunión cardenalicia desde la muerte del primer Papa latinoamericano, que abordó “temas de particular relevancia para el futuro de la Iglesia” como “algunos de los desafíos que se ponen de relieve”.

“La evangelización, la relación con otras confesiones, la cuestión de los abusos”, indicó el Vaticano en un comunicado.

Los cardenales empezarán a congregarse en la Casa Santa Marta, la residencia en el interior del Vaticano y en la que vivió Francisco durante su pontificado, en la noche del 6 de mayo, mientras que el 7 de mayo los cardenales celebrarán en San Pedro la misa “Pro eligiendo Pontífice” oficiada por el cardenal decano, Giovanni Battista Re.

En la celebración eucarística, el decano invitará a sus hermanos a dirigirse por la tarde a la Capilla Sixtina con estas palabras: “Toda la Iglesia, unida a nosotros en la oración, invoca constantemente la gracia del Espíritu Santo, para que sea elegido por nosotros un digno Pastor de todo el rebaño de Cristo”.

Desde allí, la procesión hacia la Sixtina, en cuyo interior los cardenales cantarán el himno Veni, Creator Spiritus y prestarán juramento y después empezará la votación, que será una o dos dependiendo del tiempo que tengan esa tarde tras haber realizado todos los pasos protocolarios.

En el resto de jornadas habrá dos votaciones por la mañana y dos votaciones por la tarde. Las papeletas solo se quemarán después de dos escrutinios en caso de que sean negativos y no se consigan los dos tercios de los votos, que serían cerca de 88.

El Vaticano no confirmó aún cuántos de los 135 cardenales electores participarán del cónclave.

El 80% de ellos fue designado por Francisco, muchos vienen de zonas del mundo históricamente marginadas por la Iglesia y muchos no se conocen.

“Nuestro deseo es encontrar a alguien que se parezca a Francisco, que no sea el mismo, pero en continuidad”, indicó a la prensa el purpurado argentino Ángel Sixto Rossi, de 66 años.

El estilo y las reformas impulsadas por Francisco despertaron no obstante críticas entre los sectores más conservadores, que apuestan ahora por un cambio más enfocado en la doctrina.

El italiano Pietro Parolin aparece como uno de los “papables” favoritos a medida que crecen conflictos y crisis diplomáticas por el mundo. Este cardenal ejerció como Secretario de Estado con Francisco tras ser nuncio en Venezuela.

Cardenal Becciu no participará
El cardenal Angelo Becciu, a quien Francisco quitó los privilegios de purpurado por su implicación en un escándalo financiero por el que fue condenado y que insistía en que podía entrar en el cónclave, está dispuesto a dar marcha atrás y no participar en la elección del Papa. Becciu tomó su decisión tras la congregación general de los cardenales celebrada este lunes, en la que se mostró al menos un documento firmado por Francisco que indicaba que Becciu no podía participar en el cónclave.

//AFP y EFE