En el marco del Día del Maestro, el cardenal Adalberto Martínez emitió un mensaje desde El Vaticano destacando la “dedicación silenciosa de los maestros que dejan huellas imborrables en nuestras vidas”.
“El 30 de abril celebramos el Día del Maestro en nuestro país, una fecha que nos permite reflexionar sobre su inmensa contribución a la sociedad y expresar nuestra más profunda gratitud. Su labor no solo consiste en impartir conocimientos, sino también en formar ciudadanos íntegros, inculcando valores como la justicia, la solidaridad, la paz, pilares fundamentales para la convivencia armoniosa”, reflexiona.
El religioso se encuentra en la Santa Sede para formar parte del cónclave que comenzará el 7 de mayo para elegir al sucesor del papa Francisco.
En su mensaje, el prelado resaltó que desde la primera infancia hasta la adultez, los educadores nos acompañan en nuestro camino de aprendizaje dejando huellas imborrables en nuestras vidas.
“Lo que somos, es gran medida, fruto de su dedicación silenciosa pero profundamente arraigada. A pesar de los desafíos que enfrentan-la precariedad del sistema educativo, la necesidad de profesionalizar más a los docentes en Paraguay, la falta de recursos y el poco reconocimiento- su vocación inquebrantable les permite seguir adelante, guiando con amor y compromiso a las futuras generaciones”, expresó.
El cardenal paraguayo recordó las palabras del papa Francisco quien consideró que “la educación es un acto de amor que ilumina el camino para recuperar el sentido de la fraternidad”.
“Expresamos nuestra gratitud a las maestras y los maestros del Paraguay, y reafirmamos nuestro compromiso de acompañar sus anhelos y su lucha por mejores condiciones laborales y profesionales”, remarca.
//Lanacion.com.py.