El abogado que fue denunciado por transmitir VIH a varias mujeres a sabiendas de estar infectado fue detenido esta mañana. Hasta el momento, hay siete mujeres que lo denunciaron, de las cuales cinco quedaron embarazadas y ya dieron a luz.

 

 

La fiscala Fátima Britos, encargada de investigar las denuncias de varias mujeres que dijeron haber contraído el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) por haber mantenido relaciones sexuales con un abogado que se sabía portador, confirmó que el hombre fue detenido esta mañana y permanecerá privado de su libertad, por lo pronto, en sede de Investigación de Delitos de la Policía hasta que preste declaración testifical ante el Ministerio Público.

 

Señaló que hasta el momento, de alrededor de 13 mujeres, siete denunciaron, de las cuales cinco quedaron embarazadas. “Fue por la denuncia de una cuyos exámenes médicos ya están agregados a la carpeta fiscal que se procedió a su imputación y orden de captura”, informó. Señaló que la tipificación del delito sería el de lesión grave, estipulado en el artículo 112 del Código Penal, que estipula una pena privativa de libertad de hasta 10 años.

 

La fiscala sostuvo que las sospechas consisten en que el hombre -paradójicamente un abogado dedicado al área penal, de 40 años- mantenía relaciones sexuales con estas mujeres pese a estar conciente de su condición. Las declaraciones testificales de las víctimas dan cuenta de que supuestamente al inicio el contacto sexual era con protección; sin embargo, “él les manifestaba que quería tener hijos y era ahí cuando dejaban de protegerse”, señaló.

 

De las cinco que denunciaron y quedaron embarazadas, afortunadamente ninguno de los niños fue infectado, según dijo. Sin embargo, acotó que extraoficialmente le llegó la información de que el hijo de otra de las víctimas, que aún no hizo su denuncia por temor, sí habría contraído el virus.

 

Además, se maneja que dos de las mujeres con quienes el abogado mantuvo relaciones sexuales ya fallecieron.

 

El nombre del imputado es omitido para evitar el relacionamiento con las víctimas y porque la Ley N° 3.940/09, sobre la confidencialidad de la identidad de los portadores de este tipo de enfermedades, así lo estipula./Abc.