Las fiestas de Navidad y Año Nuevo pueden representar un desafío emocional significativo para personas que experimentan pérdidas de sus seres queridos, dificultades económicas, entre otros problemas.
El apoyo emocional y la comprensión son cruciales para contrarrestar el impacto negativo en la salud mental, afirmó el Dr. Marcelo O’Higgins, psiquiatra del Hospital de Clínicas.
Las festividades a menudo resaltan la importancia de la familia y la alegría, lo que puede agravar sentimientos de soledad y tristeza. Es así que durante esta temporada pueden salir a relucir con más fuerza los trastornos de ansiedad y depresión, explicó el psiquiatra.
Respecto a los síntomas de ansiedad dijo que los más notorio, inicialmente, son a veces síntomas físicos como por ejemplo que a la persona afectada le aprieta el pecho, le falta aire, siente que se ahoga, puede tener tensión muscular o a veces sensación de entumecimiento de los miembros. Aparte, hay otros síntomas que son cognitivos, entendidos estos como la preocupación permanente, piensa mucho, a veces como rumiando, repitiendo y repitiendo constantemente el pensamiento de cosas que creen que va a salir mal o que no les está saliendo bien.
El Dr. Marcelo O’Higgins manifestó que suelen haber también otras conductas como son las de carácter evitativas. “Las personas ansiosas suelen evitar circunstancias que le empeoran la ansiedad o evitan hablar con ciertas personas, o evitan exponerse a circunstancias que pueden empeorar estos síntomas. Así vimos que hay un conjunto de síntomas que podría meter la ansiedad, que hay diferentes tipos de trastornos que podrían englobarse, dependiendo de que predomine o no uno de los síntomas”, resaltó.
Las personas ansiosas suelen estar también acompañadas de cuadros depresivos, detalló. Agregó que un cuadro ansioso, si se deja estar mucho tiempo puede terminar también sumándose a una depresión y viceversa. Es atendiendo a que el subtipo más común de depresión tiene características ansiosas.
Añadió que una persona con depresión tiene más riesgo de volver a tener una comorbilidad con ansiedad en algún momento de su vida. Instó que en lo posible las personas con síntomas puedan consultar con algún profesional de salud mental, sea un psicólogo o un psiquiatra, como visitaría a un cardiólogo si le duele el corazón, por ser los especialistas indicados.
En cuanto a qué pueden hacer las personas que tienen familiares, amigos o conocidos con cuadros de depresión o ansiedad señaló que lo primero siempre es ponerse a disposición de ellas. “Una persona ansiosa que está totalmente preocupada o que evita las cosas, entender que hay alguien que le va a aceptar igual en esa situación y que le entiende, que capaz no entienda toda la patología, pero que entiende que está sufriendo, creo que es lo primordial”.
Manifestó que a las personas afectadas en su salud mental deben estar acompañadas, por lo menos realizarles llamadas telefónicas, de tal manera a que se sientan acompañadas, ya que eso les ayuda muchísimo. Más aún en estas fiestas, tratar de realizar actividades con ellos, buscar ocupar su tiempo. “Si uno nota alguna cosa que le llama la atención en la persona, preguntarle qué tal se siente o si quiere recibir ayuda; si nota un signo de alarma, si empieza a hablar de la muerte o empieza a hacerse daño, recordar que acá tenemos un servicio de urgencias de 24 horas, también en el hospital psiquiátrico, acompañarle a consultar, porque a veces intervenir lo antes posible en este tipo de cuadros previene muchos desenlaces no deseados”, acotó.
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