Niños y niñas de la humilde escuela María Auxiliadora de Caaguazú, deben sortear frio, barro y toldos con agujeros para estudiar, debido que la empresa que debió encargarse de la construcción de las aulas no construyó nada en el lugar. Los docentes y padres de familia, solicitan la intervención de las autoridades para verificar que sucede en el lugar.
Los alumnos de la Escuela Básica, N° 4.080, María Auxiliadora, desarrollan clases bajo carpa debido a la irresponsabilidad de la empresa adjudicada para la construcción de las aulas en el lugar. La obra debió iniciarse en enero de este año.
La situación en el lugar es cada vez más crítica, debido que las carpas o toldos instalados en el lugar, se encuentran deterioradas, con agujeros y en días de lluvias, el suelo húmedo, con agua, convierte el lugar en una zona in habitable.
De acuerdo a los datos la empresa Chávez construcciones, el Ingeniero Civil, Roberto Chávez, debió realizar el trabajo, pero hasta este mes de junio, la construcción no avanza.
Según el portal de Contrataciones Pública, la empresa aganó la licitación por un monto total de ₲ 2.831.259.652, que también incluye otras obras.
El director de la casa de estudios, explicó a los medio de prensa, que la firma constructora entregó una lista de materiales que se utilizarán en el lugar, pero en la nómina no aparecen los precios, por lo que una vez más surge la duda de la seriedad de la constructora, que debió trabajar con el dinero proveniente del Fonacide, designado a la Municipalidad de Caaguazú.
Actualmente la escuela cuenta con 140 alumnos, desde el primer grado hasta el noveno y de acuerdo a las informaciones, después de las denuncias por los medios de prensa de la ciudad de Caaguazú, el día viernes 16 de junio, aparecieron en el sitio dos albañiles.
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