El ministro del Trabajo, Guillermo Sosa, aseguró que la familia de clase media no puede pagar un sueldo mínimo de 2.500.000 (sumando el monto a destinarse al seguro del IPS) a sus trabajadores domésticos, por lo que de concretarse ese proyecto, se generará un gran desempleo.
“Me encanta eso, porque quiero que ganen ese monto, pero quiero ser realista, ¿la clase media paraguaya, no la clase alta, le va a contratar a la empleada doméstica en 2.500.000 (guaraníes)? No le va a contratar. ¿Qué va a hacer la clase media? No va a tener más empleada doméstica y le va a contratar a una chica por hora que va a venir dos veces a la semana“, indicó.
Sosa esgrimió que esta situación, si es que el Congreso lo aprueba y el próximo gobierno no lo veta, generará el incremento del desempleo, al no poder pagarse el monto establecido
En contrapartida, la autoridad apuntó a la capacitación de estas trabajadoras, para que las mismas sepan hacer más cosas en la casa y las familias paguen con gusto el salario mínimo por sus desempeños.
Por otra parte, habló del mismo sueldo mínimo, que para mucho no alcanza y, para más, muchos paraguayos ni siquiera llegan a cobrar lo legalmente establecido. El ministro asegura que esto se debe a los trabajos informales y a empresas que operan “en negro”.
La Cámara de Senadores aprobó el proyecto de ley que permitirá a las empleadas domésticas percibir el 100% del salario mínimo legal vigente. La propuesta pasa ahora a Diputados para su tratamiento.
La Ley 5407/15 «Del Trabajo Doméstico» incluye a los choferes del servicio familiar, las amas de llave, las mucamas, las lavanderas y planchadoras en casas particulares, las niñeras, las cocineras de la casa de familia y sus ayudantes, los jardineros en relación de dependencia y ayudantes, las cuidadoras de enfermos, ancianos o minusválidos y los mandaderos.