Cuando el viernes pasado el termómetro marcó 30°C y la sensación térmica rozó los 35°C para la región metropolitana, el panorama climático con un otoño ya avanzado era desconcertante, cuando todavía conviven en la calle las hojas amarillentas caídas de algunos árboles con otros que aún conservan gran parte de su follaje verde.
Hacia la noche del viernes y hasta ayer, finalmente se cumplió la alerta del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) que anticipaba tormentas intensas con truenos, rayos, granizo y vientos fuertes.
Pero ¿a qué se debió ese cambio tan brusco del tiempo? A una combinación de aire caliente, muy húmedo e inestable, con un frente de aire frío estacionario en la zona, de acuerdo con el SMN. Eso provocó vientos que pudieron superar los 100 km/h con lluvias torrenciales. Solo en la ciudad de Buenos Aires cayeron más de 108 milímetros de agua en apenas 24 horas. Eso es casi lo mismo que llueve en todo el mes de abril.
«Teníamos una masa de aire muy cálida, tropical, muy inestable, y mucha humedad. Entre el jueves y el viernes avanzó un frente frío que estaba hasta entonces con muy poco desplazamiento en el sur de la provincia de Buenos Aires. La combinación de los dos frentes volvió más inestable la atmósfera y causó las tormentas, que en algunos casos fueron bastante intensas», explicó Cindy Fernández, vocera del SMN.
La alerta meteorológica del viernes se cumplió a la noche en La Plata, Bragado, San Miguel del Monte y algunas áreas de Pilar, en el norte bonaerense. «Pero el frente de aire frío se quedó sobre el norte de la provincia de Buenos Aires y siguió generando lluvias y tormentas, que, en su mayoría, terminaron afectando a la Capital y el Gran Buenos Aires», agregó Fernández.
En total, según reportó el SMN, entre Morón, Merlo, Nueve de Julio, Junín, San Fernando, Moreno, La Plata y la ciudad de Buenos Aires, cayeron 613 milímetros en las últimas 24 horas. Los valores corresponder al período comprendido entre las 9 del 28/04 y las 9 del 29/04,
Un evento La Niña (la fase fría del fenómeno El Niño-Oscilación del Sur) que comenzó a debilitarse hace dos meses explicaría apenas en parte el calor durante el otoño. «En este abril, desde que se toman los registros históricos de la Argentina, prevaleció el viento norte con mucha humedad», agregó la vocera del SMN. Eso hizo que predominaran las temperaturas altas. El aire cálido enseguida interrumpía los frentes fríos que aparecían y los limitaba a la Patagonia.
«Las tormentas de este fin de semana se debieron a que el ingreso de un frente de aire frío interrumpió a esa masa de aire cálida tan inestable», indicó Fernández.
Fuente La Nación.