Un adolescente de 14 años perderá uno de sus ojos a causa de la pirotecnia. Este y otros casos que involucren a menores de edad serán comunicados al Ministerio Público.

El jovencito llegó al Hospital de Trauma con el ojo ensangrentado luego que una bombita le explotara en la cara.

“El menor de 14 años perderá la visión, tiene una lesión irreversible en la cornea”, lamentó el director Agustín Saldívar.

El nosocomio recibió 8 pacientes heridos con pirotecnias, de los cuales 7 fueron menores de edad. Una niña de 5 años sufrió lesiones en el ojo por una caña silbadora; un nene de 10 años perdió 3 dedos, un 12×1 explotó en su mano; un nene de 6 años corrió la misma suerte pero con la explosión de un cebollón.

El doctor advirtió que pedirá la intervención de la Fiscalía cada vez que llegue un menor víctima de los fuegos artificiales.

“Tenemos que ser duros a la hora de aplicar la justicia en estos casos, de lo contrario son los más chicos los que pagarán las consecuencias”, dijo el director.

El Centro Nacional del Quemado atendió a 5 víctimas de bombas. “El caso más grave es del niño con quemaduras en rostro, cuello y tórax, que se encuentra en terapia intensiva. Este año tuvimos menos heridos con explosivos potentes, pero la gente no dimensiona la peligrosidad de un fosforito”, dijo el doctor Bruno Balmelli. // EXTRA