El 2 de enero del año 2020, llegó al mundo María Cristine, con apenas seis meses de gestación y 720 gramos, a través de un parto por cesárea de urgencia. La pequeña quedo huérfana de madre un día después de haber nacido.

Su nacimiento fue prematuro debido a que querían salvar la vida de su madre con COVID-19 positivo, mientras que la posibilidad de vida era de 0% para María, por su edad y peso, pero hoy está cerca de cumplir su primer añito.

Michelle Zarza, madre de la pequeña era enfermera, quien en diciembre del año pasado, cuando apenas tenía cinco meses de embarazo, se contagió del virus por lo que fue internada.

En ese sentido, la ciencia, la fe y la buena voluntad se aliaron para salvar a María. Su historia está cargada de emociones. Al día siguiente después de dar a luz la madre de la niña lastimosamente falleció a causa del COVID-19.

La pequeña junto con su papá y demás familiares acudieron el pasado jueves 16 de diciembre hasta el Materno Infantil San Pablo como agradecimiento a los profesionales de salud y a la vez realizar un festejo anticipado por el cumpleaños de la pequeña, quien luego de estar 65 días en terapia logró salir del nosocomio.