Brasil registró este miércoles otras 1.086 muertes y 20.599 casos de COVID-19 en 24 horas, superando la marca de los 25.000 fallecidos y de los 400.000 casos por la pandemia, cuyo epicentro mundial es ahora América Latina.
Es la segunda vez que el país registra más de 20.000 casos en un único día, según los balances emitidos por el Ministerio de la Salud.
Brasil, con más de 210 millones de habitantes, totaliza hasta este miércoles 411.821 casos y 25.598 muertes por el COVID-19. Sin embargo, para especialistas el número de contagiados podría ser hasta 15 veces superior debido a la subnotificación a consecuencia de la falta de exámenes.
Es el segundo país con más diagnósticos en el mundo y el que ha registrado más muertes diarias durante los últimos cinco días, superando a Estados Unidos, que aún no difundió los números de este miércoles.
El estado de San Pablo continúa siendo el epicentro nacional de la pandemia, con 89.483 casos y 6.712 fallecidos. A pesar de los números, este miércoles el gobernador Joao Doria anunció un plan de reapertura gradual de la economía que será aplicado a partir del 1 de junio por regiones y considerará criterios sanitarios para permitir el funcionamiento de comercios no esenciales.
El avance de la pandemia en Brasil ha estado marcado por la falta de coordinación entre el presidente de ultraderecha Jair Bolsonaro y los gobernadores y alcaldes. Las medidas de confinamiento para contener la propagación del virus, criticadas frecuentemente por Bolsonaro, son el principal punto de desencuentro.
La posición de Bolsonaro, que llegó a calificar de «gripecita» la enfermedad que ya dejó más de 352.000 víctimas fatales en todo el mundo, también derivó en la salida de dos ministros de Salud en menos de un mes.
La cartera está siendo administrada de forma interina por el general Eduardo Pazuello desde el 15 de mayo.
Fuente; La Nación