Los atletas deberán dormir en unas camas de cartón diseñadas para dormir pero que se podrían romper en caso de relaciones sexuales. Se reciclarán tras la cita olímpica.
La organización de los Juegos Olímpicos de Tokio ha dado un paso más en su lucha para evitar posibles contagios por coronavirus durante la celebración de la cita olímpica del 23 de julio al 8 de agosto, en un evento que se celebrará sin público en las gradas ante el incremento de contagios por coronavirus en Tokio en las últimas semanas y que ha llevado a las autoridades a decretar el estado de emergencia en la región hasta el 22 de agosto.
Una de estas medidas curiosas tiene que ver con las camas en las que los deportistas dormirán durante su estancia en la Villa Olímpica. Pese a que la organización acordó el pasado mes de junio el reparto de condones a los deportistas aunque recomendó que no se mantuvieran relaciones sexuales durante la celebración de los Juegos, ahora han tomado una medida que imposibilita aún más que se puedan producir estas relaciones.
El motivo es que los organizadores han colocado cerca de 18.000 camas de cartón en las diversas estancias de la Villa Olímpica, diseñadas para que los atletas puedan dormir… pero que se rompen si soportan un peso mayor del indicado. Otra de las razones esgrimidas para el uso de estas camas, que fueron desveladas en enero de 2020 es el compromiso adquirido por Japón para garantizar unos juegos sostenibles con el medio ambiente, ya que las camas son reciclables y su material se aprovechará tras la celebración de la cita olímpica. Habrá que esperar para conocer las reacciones de los deportistas sobre estas camas que traerán innovación y polémica a partes iguales.
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