El miércoles pasado, unos 40 alumnos del tercer curso del Instituto Agropecuario Carlos Pfannl se manifestaron frente a la institución, ubicado en el Km 140 de la Ruta PY02 Santa María Ñu de Coronel Oviedo, en reclamo por la aparente continuidad de la modalidad de clases híbridas.
Este grupo de estudiantes que debe egresar este año, apoyado por algunos padres, exige la implementación plena de clases presenciales y la participación de los estudiantes en torneos estudiantiles. El conflicto se ha suscitado ya hace unos días y no tiene visos de solución.
Como casi nunca ha ocurrido en la historia del Instituto Agropecuario Carlos Pfannl, una emblemática institución salesiana asentada a unos 5 kilómetros al este del centro de Coronel Oviedo, un grupo de alumnos de esta casa de estudios viene realizando ásperos reclamos y sosteniendo fuerte oposición a los manejos de la institución.
Modalidad de internado
Esta escuela, que sigue las enseñanzas salesianas delineadas por el sacerdote y educador italiano Don Bosco (1815-1888), siempre se ha manejado con una férrea disciplina que ahora un grupo de alumnos trata de romper sin lograrlo hasta el momento.
La institución implementa la modalidad de internados, es decir, los alumnos estudian y viven en el lugar, pero cuando algún alumno incurre en falta de disciplina implementa la modalidad de externado, es decir, impide a dicho alumno a asistir a clases.
Esta regla se está cumpliendo con los alumnos del tercer curso quienes en la noche de este martes tuvieron que dormir en la Residencia Universitaria, un albergue estudiantil perteneciente a la gobernación de Caaguazú que se encuentra en la salida norte de Coronel Oviedo.
“Acá hay reglas”
Ya en días anteriores, estos alumnos “rebeldes” implementaron una medida de fuerza consistente en permanecer en sus dormitorios negándose a participar de las actividades de la institución y denunciaron que se les habría negado comida.
Sin embargo, responsables de la institución salieron al paso aclarando que en ningún momento se les negó la alimentación y lo que pasó fue que ellos se rebelaron y se negaron a salir de sus dormitorios para ir al comedor a servirse con los demás alumnos.
“Acá hay reglas. La comida se sirve en el comedor y estos alumnos se negaron a salir de sus dormitorios a la hora del almuerzo y en otros horarios. Entonces ellos querían que se les sirva la comida en los dormitorios lo que riñe con las reglas”, indicó el padre Marcos Caballero, uno de los docentes. El sacerdote agregó que hacer huelga trae sus consecuencias.
“Siempre hubo externados, alumnos que incumplen las reglas y dejan de ser admitidos como internados, siempre hubo eso. Ahora estos alumnos lo hacen en grupo. En forma grupal ellos afrontan y en forma grupal también van a recibir… algunos dicen castigo, pero no es castigo”, explicó Caballero.
“Es una disposición del colegio; sus reglas disponen eso. Uno se ajusta a las reglas y si no se ajusta no tiene por qué estar acá”, aseveró. El sacerdote igualmente aclaró que ahora ya se está implementando las clases en la modalidad presencial al ciento por ciento para los alumnos que cumplen con las reglas de la casa de estudios.
//Omar Jara